La Plata, martes 11 de enero 2011
- Comunicado de Prensa -
Miércoles 12 – 12hs
En la Municipalidad de La Plata
Francisco Torres (MST):
"Se ejerce violencia institucional para acallar voces opositoras a Bruera"
Este miércoles 12, practicamente todo el arco opositor se dará cita a las 12hs en la Municipalidad de La Plata para reclamar una audiencia urgente al intendente. Francisco Torres , dirigente del MST , fuerza integrante del Movimiento Proyecto Sur , señaló: "las denuncias que realizamos en común desde tan amplio arco politico y social sólo pueden explicarse porque se ejerce una sistemática violencia institucional para acallar las voces opositoras a Bruera. Algo muy grave y todos hemos padecido ese sistema violento instrumentado desde el estado municipal” .
La nota que entregrán a Bruera va acompañada de un Anexo (ver archivos adjuntos) denunciando una serie de hechos gravísimos padecidos por vecinos mientras reclamaban o por fuerzas políticas que expresaban una idea distinta a la del oficialismo municipal. Torres señaló: "esperamos ser recibidos para poder plantear soluciones que pongan fin a esta espiral de violencia política que se ejerce institucionalemente” .
• Nuevas firmas se suman al pedido de audiencia:
Agrupación Enrique Mosconi, FeTERA - CTA / Agrupación Germán Abdala - CTA / Ammar - Sindicato de Trabajadoras Sexuales / ATE Provincia - Secretaría de Organización / Corriente Sindical del MST / Federación de Trabajadores Jubilados y Pensionados, FETRAJUB-CTA / Grupo Defendamos La Plata / Pueblos Originarios / Coalición Cívica - ARI / EDE - Encuentro por la Democracia y la Equidad / Frente para la Victoria / GEN - Generación para un Encuentro Nacional / Instrumento por la Unidad Popular / Libres del Sur / Movimiento Proyecto Sur / MST - Movimiento Socialista de los Trabajadores / PCR - Partido Comunista Revolucionario / Partido Proyecto Sur / PRO - Propuesta Republicana / PS - Partido Socialista / PSA - Partido Socialista Auténtico / PTP - Partido del Trabajo y el Pueblo / Agrupación 19 de Noviembre / Agrupación Municipal Militancia / Marea del Sur / Unión del Pueblo / Senador Provincial Luis Malagamba, GEN / Diputado Provincial Julio Garro, PRO / Diputado Provincial Oscar Negrelli, Coalición Cívica / Comisión Ejecutiva Nacional CTA, Julio Ortellado / Secretaría de Interior, Guillermo García, CTA - La Plata Ensenada / Sergio Escobar, Delegado Astillero Río Santiago / Siguen firmas ...
11 ene 2011
TOMARON EL BANCO PROVINCIA DE LANUS
REBELION Informa
Lunes 10 de enero 2010
A raíz de el manoseo al que nos tiene acostumbrado el intendente justicialista Darío Díaz Pérez de Lanus. Nuestro FTC-M29 volvió a utilizar el método proletario y eficaz de la toma del Banco Provincia de Buenos Aires.
El resultado fue mas que positivo, ya que los responsables políticos del distrito aparecieron en la inmediatez, luego de las horas de toma de la sucursal del banco provincia de Monte Chingolo (Lanus)
ARRIBA LOS QUE LUCHAN.
POR TRABAJO DIGNIDAD Y CAMBIO SOCIAL
Área propaganda FTC-M29
Lunes 10 de enero 2010
A raíz de el manoseo al que nos tiene acostumbrado el intendente justicialista Darío Díaz Pérez de Lanus. Nuestro FTC-M29 volvió a utilizar el método proletario y eficaz de la toma del Banco Provincia de Buenos Aires.
El resultado fue mas que positivo, ya que los responsables políticos del distrito aparecieron en la inmediatez, luego de las horas de toma de la sucursal del banco provincia de Monte Chingolo (Lanus)
ARRIBA LOS QUE LUCHAN.
POR TRABAJO DIGNIDAD Y CAMBIO SOCIAL
Área propaganda FTC-M29
PARTIDO OBRERO: UN LOCK-OUT DE MATURANO CONTRA LOS TERCERIZADOS, ANTE LA INMINENTE INDAGATORIA JUDICIAL A JOSE PEDRAZA
El paro realizado por La Fraternidad en el día de hoy, que dejó sin transporte a centenares de miles de personas, no obedeció a ninguna reivindicación obrera; fue un paro patronal, porque defiende el “derecho” de la burocracia empresarial a seguir lucrando con la tercerización. Ningún juez los va a procesar por extorsión, como sí lo hicieron con los luchadores de Causa Ferroviaria, que apoyaron una acción obrera de carácter colectivo en defensa de los tercerizados.
Para los burócratas, el ingreso de más de un millar de tercerizados desafiaría su prerrogativa a incorporar a elementos afines a ellos al ferrocarril, como quedó de manifiesto en la postulación de Cristian Favale, uno de los patoteros detenidos por el crimen de Mariano Ferreyra.
Desde el Partido Obrero denunciamos que se trata de un lock out preventivo, ante la noticia de que se ha reimplantado, en la feria judicial, el secreto del sumario en la causa del asesinato de nuestro compañero Mariano Ferreyra, lo cual es interpretado como la antesala de la indagatoria y la prisión preventiva para José Pedraza. Esta detención sería un golpe descomunal al pacto entre el estado, la burocracia sindical y los gerenciadores privados en la gestión del ferrocarril.
Según las versiones, Maturano levantó el lock out luego de un “compromiso de palabra” del ministro Tomada sobre las tercerizaciones, cuyo contenido no se conoce.
El Partido Obrero advierte de la situación que se ha planteado y llama a todos los tercerizados ferroviarios y sus agrupaciones a unificar los esfuerzos para la plena incorporación a la planta permanente del ferrocarril y reincorporación de los trabajadores despedidos. Equiparación salarial de los meses pasados.
Asimismo, reclamamos la ruptura del pacto de gestión mafioso del ferrocarril y su estatización integral, o sea gestión de los poderes públicos bajo el control de un comité electo de trabajadores ferroviarios.
-Juicio y castigo a TODOS los responsables políticos y materiales del crimen de Mariano Ferreyra.
-Desprocesamiento inmediato de Belliboni, Hospital, Merino y Morales, luchadores contra la tercerización.
Para los burócratas, el ingreso de más de un millar de tercerizados desafiaría su prerrogativa a incorporar a elementos afines a ellos al ferrocarril, como quedó de manifiesto en la postulación de Cristian Favale, uno de los patoteros detenidos por el crimen de Mariano Ferreyra.
Desde el Partido Obrero denunciamos que se trata de un lock out preventivo, ante la noticia de que se ha reimplantado, en la feria judicial, el secreto del sumario en la causa del asesinato de nuestro compañero Mariano Ferreyra, lo cual es interpretado como la antesala de la indagatoria y la prisión preventiva para José Pedraza. Esta detención sería un golpe descomunal al pacto entre el estado, la burocracia sindical y los gerenciadores privados en la gestión del ferrocarril.
Según las versiones, Maturano levantó el lock out luego de un “compromiso de palabra” del ministro Tomada sobre las tercerizaciones, cuyo contenido no se conoce.
El Partido Obrero advierte de la situación que se ha planteado y llama a todos los tercerizados ferroviarios y sus agrupaciones a unificar los esfuerzos para la plena incorporación a la planta permanente del ferrocarril y reincorporación de los trabajadores despedidos. Equiparación salarial de los meses pasados.
Asimismo, reclamamos la ruptura del pacto de gestión mafioso del ferrocarril y su estatización integral, o sea gestión de los poderes públicos bajo el control de un comité electo de trabajadores ferroviarios.
-Juicio y castigo a TODOS los responsables políticos y materiales del crimen de Mariano Ferreyra.
-Desprocesamiento inmediato de Belliboni, Hospital, Merino y Morales, luchadores contra la tercerización.
10 ene 2011
RESPUESTA DE JORGE ALTAMIRA A NORBERTO GALASSO
QUÉ BAJO QUE CAÍSTE, GALASSO
No sorprende que el historiador Norberto Galasso se sume a la campaña macartista desatada por el gobierno nacional y sus cortesanos para criminalizar al Partido Obrero y para combatirlo, como dice uno de sus escribas, “con el Código Penal” – la primera manifestación concreta de la ‘nueva’ política de “seguridad democrática”, para enfrentar la movilización social, que le sopló al oído la estirpe de los Verbitsky a la nueva ministra de Seguridad. En una ‘carta’ que fue difundida en forma instantánea y profusa, en su mayor parte por los ‘blogs’ alcahuetes del oficialismo (que seguramente no harán lo mismo con esta respuesta), Galasso no pronuncia dos frases inevitables en la boca de cualquier luchador: “la patota de Pedraza” y “j! uicio y castigo a TODOS los culpables”. Al revés: “puede caer sobre vos”, dice Galasso, en referencia a Altamira, “la responsabilidad de lo que ocurra a militantes que son víctimas de enfrentamientos como los que hemos visto”. Se trata, ojo, de una amenaza – claro, desde el campo popular, que no formula al pasar sino que repite: “pensá, nos dice, en los pibes que podés arriesgar”. ¿Este hombre sospecha siquiera el nivel de su bancarrota política y hasta de su bajeza? Estamos en peligro, no por las patotas de Pedraza, Maturano, West Ocampo, Gerardo Martínez, Guillermo Moreno, el ‘caballo’ Suárez, Capaccioli, Otacehé, la policía de Barracas y Avellaneda, la de Soldati, la de Primavera en Formosa, sino por los piquetes ferroviarios, o, para el caso, todos los piquetes de todos los luchadores, y de activistas como Mariano Ferreyra. No hay que purg! ar al poder político de estas mafias, sino desencadenar una campaña macartista contra el PO. Galasso no llega siquiera a formular una teoría de los dos demonios – para él y los otros cortesanos el demonio es uno solo. Si nosotros somos los responsables del asesinato de nuestro compañero, la patota de Pedraza es un asunto secundario.
Galasso va más lejos todavía: respalda la tesis de los abogados defensores de los asesinos – el “enfrentamiento” – que fue refutada sin atenuantes, tanto por la jueza de primera instancia como luego por los tres jueces de la Cámara del Crimen. ¿No te has dado cuenta, Galasso, del pozo de inmundicia en el que has caído? Galasso cierra de este modo el círculo de la campaña de criminalización que inició, el mismo 20 de octubre, la Presidenta de la Nación, cuando responsabilizó por el crimen a “los que usan palos en las manifestaciones” y “a los estudiantes que forzaron la puerta del Consejo Nacional de Educación”. Después de esto, vinieron las diatribas del tipo “el PO le tiró un muerto al gobierno nacional y popular”, “los troscos son funcionales a Duhalde&rdqu! o; – algo de lo que no se acordaron cuando Kirchner fue llevado de la mano a la Presidencia por el responsable político de los asesinatos de Kosteki y Santillán – que de paso le impuso más de medio gabinete, incluida la mayor parte de los actuales ministros, intendentes y punteros. Después del asesinato de Mariano, el kirchnerista Insfrán se cobró la vida de dos campesinos formoseños tobas, y la policía del jefe nombrado por Néstor Kirchner y la Metropolitana la de dos pobladores de Villa Soldati. Ni las policías, ni Insfrán están imputados; al revés, el gobierno apoya la reelección del formoseño y acabó firmando un pacto con Macri para castigar con la privación de derechos sociales la lucha de los pobladores por la vivienda.
Si el asesinato de Mariano Ferreyra obedeció a la necesidad de defender las tercerizaciones –un régimen de superexplotación para beneficiar a los grandes capitales -, la de los tobas fue ‘funcional’ a los intereses de los terratenientes sojeros y la de Soldati a la especulación inmobiliaria en la Ciudad. En lugar de lanzar la alarma acusadora: ¿A dónde vas Cristina? o la advertencia preventiva: ¿A dónde te estás dejando llevar?, Galasso apunta contra ‘el enemigo principal’, que es, según él mismo, la prioridad que debe tener cualquier ataque político – Altamira y el Partido Obrero. Nos ha convertido en el ‘enemigo principal’ – a nosotros, no a Pedraza. Este es el significado sin falacias que tiene su frase introductoria, en la que asegura tener con Altamira” un punto teór! ico (sic) común: …crear la sociedad solidaria, igualitaria, donde brote y se consolide el Hombre Nuevo”. En realidad, nos quiere aplicar el Código Penal. ¿Qué patraña, no?
Galasso califica a nuestros militantes jóvenes como pibes, no por un acto de cariño sino para despreciar la madurez que han alcanzado y la conciencia que tienen de sus propios actos. En cambio, La Cámpora, que homenajeó a Insfrán en las vísperas del asesinato de los tobas, o la Juventud Sindical de triste memoria, que festejó con CFK en River pocas horas antes del asesinato de Mariano, son para él una juventud maravillosa. La 'carta' de Galasso es una provocación en cada línea y un monumento al caradurismo.
Encubrir a los Pedraza
Galasso no se aparta del encubrimiento de la patota que asesinó a Mariano Ferreyra en ningún momento de su texto. Galasso repite la versión de que “las bandas de derecha” procedieron al saqueo de la estación Constitución, aunque, una a favor de él, se abstiene en este caso de acusarnos a nosotros mismos por esos saqueos, claro que sin denunciar que eso es lo que hizo su ministra Nilda Garré y su compañero de ruta (¿ocasional?) Horacio Verbitsky – ninguno de los cuales apoyó sus infamias en la sede judicial. En cambio, sí lo hizo Juan Pablo Schiavi, secretario de transportes y jefe de del subsecretario Antonio Luna-hombre de Maturano y de Pedraza, quien acusó por los hechos de Constitución a nuestros militantes ferroviarios en el juzgado que dispuso procesarlos por el corte de vías de Avellaneda.
Si es como dice Galasso, ¿por qué no hay ningún imputado por los desmanes de Constitución, cuando el diario La Nación publicó fotos de sus actores y existen los monitores propios de la estación? ¿No pensaste en esto Galasso – al menos en las noches, cuando “el músculo duerme y la ambición descansa”? Pero el encubrimiento de lo ocurrido en Constitución, por parte de la camarilla de la ‘seguridad democrática’, es decir del Código Penal y de los gases vomitivos, obedece a una razón simple: los desmanes fueron armados por la patota de la burocracia ferroviaria, con la intención de revertir la posibilidad de la prisión preventiva para los siete acusados por el asesinato de Mariano, como ya se había expresado antes, pero que a Galasso lo tiene sin cuidado, en los paros! de la Fraternidad para “liberar a los presos” y en ‘asambleas’ armadas por la UF en Temperley con el mismo slogan.
Galasso se mofa, con el mismo estilo antiobrero de la prensa ‘destituyente’ (que ahora copia la oficialista) de un corte de “20 muchachos rebeldes”, para ningunear, como lo hace la derecha, la reivindicación del corte: el cese de los despidos y de las tercerizaciones – que reclaman miles y miles en el ferrocarril. Despidos y tercerizaciones que expresan la explotación acrecentada del capital sobre el trabajo y el despojo de los obreros por la burocracia sindical. ¡Pero qué carajo le puede importar esto a la “izquierda nacional”! Los 250 compañeros que cortaron las vías dejaron al desnudo que el gobierno maravilloso de Galasso no estaba cumpliendo -y sigue sin cumplir- las actas de incorporación a planta permanente de los tercerizados. Pero el gobierno incumple lo firmado porque tiene una asociación política y económica con esa burocracia, que por ello es un enorme factor de poder en el gobierno nac& pop. Galasso repite como un loro el verso de todo el oficialismo de que, ‘naturalmente’, a este gobierno fabuloso “le quedan muchas cuentas pendientes, mucho para hacer” (la contraseña para la reelección). Si fuera así (admitamos tal cosa por un momento), ¿por qué no pone manos a la obra y echa a los Pedraza de la gestión del ferrocarril, los echa de la secretaría de Transporte, expulsa a los capitalistas coimeros de Ugofe y pone al ferrocarril bajo administración estatal directa, con control de delegados obreros electos? Pero esto que el gobierno no hace, ni ha dicho que vaya a hacer, tampoco lo reclaman Galasso y sus compinches de la corte oficial: avalan la continuidad de la patota en uno de los principales núcleos de poder y al frente de uno de los ejemplos de mayor corrupción económica y desfalco de los fondos nacionales. Galasso es un simple encubridor que se disfraza con la muletilla de “la contradicción principal”. Los Pedraza son parte del poder kirchnerista – y no en pequeña medida. Galasso quiere un Hombre Nuevo pero no un ferroviario mejor pago, que trabaje en condiciones menos inhumanas. Galasso: volvé a leer tu ‘carta’ y ponete a llorar. Pero después de todo: ¿la ‘izquierda nacional’ no apoyó toda la vida a la burocracia sindical – incluso en los criminales años 70?
El “enemigo principal”
Todo este desvergonzado embuste, que lo coloca en el campo de los encubridores del asesinato de nuestro compañero Mariano y en el de los enemigos de los obreros ferroviarios, Galasso lo justifica con la tesis del “enemigo principal”; hay que apoyar a CFK (y por sobre todo su reelección) para que no triunfe el ‘enemigo principal’, la derecha. En realidad estamos ante un embuste, porque en ningún momento Galasso caracteriza a CFK como un enemigo de clase, aún ‘secundario’, de los trabajadores, ni tampoco propone, bajo ninguna forma, desarrollar una organización clasista que combata al gobierno - al menos como enemigo de clase ‘secundario’.Después de todo, el objetivo de un socialista que combate al ‘enemigo principal’ no es fortalecer al ‘enemigo secundario’, que! por secundario que sea es un enemigo de clase, sino aprovechar el debilitamiento del frente de clase en su conjunto que implica una derrota del ‘enemigo principal’, para acabar con la dominación de clase en general. En definitiva, en lugar de plantear alguna forma de oposición de clase al gobierno capitalista ‘secundario’, o de correlacionar la lucha contra el enemigo de clase ‘principal’ con la oposición a todo gobierno de clase de la burguesía,
Galasso dedica sus esfuerzos a amenazar a nuestros ‘pibes’ con futuros ‘pedrazazos’, es decir, a valerse de los Pedraza como muro de defensa del gobierno kirchnerista. Como ocurre en política con los francotiradores, Galasso se pone al servicio de todas las provocaciones. Precisamente, es una provocación, que Galasso no denuncia ni podría denunciar, el fallo que procesó a nuestros compañeros ferroviarios por “extorsión”, con motivo del corte de vías de Avellaneda, porque convierte a esa condición a cualquier demanda reivindicativa que se apoya en medidas de acción directa efectiva. CFK ha logrado su propósito inicial de criminalizar (código penal) a nuestro partido. Un juez que califica de ‘extorsión’ a una demanda dirigida a una persona ideal, no física, como el Ministeri! o de Trabajo, no pudo haber actuado de este modo sin que mediara una exigencia del poder político.
El más ‘célebre’ modo de uso de la tesis de la contradicción principal, la ofreció el partido comunista en 1976 cuando llamó a apoyar a la dictadura militar, con la consideración de que el ‘enemigo principal’ eran los Suárez Mason y Menéndez, caracterizados como pinochetistas, frente a Videla. Es el mismo método que aplica Galasso: fuera del análisis concreto de una situación concreta, siempre hay algún villano al que se puede imputar la condición de ‘enemigo principal’ y, por esta vía, absolver de culpas al enemigo que le sigue en jerarquía. En el ejemplo clásico de la revolución rusa, nadie puede cuestionar que el ‘enemigo principal’, durante 250 días seguidos menos dos, fue el gobierno kirchnerista ruso de Ker! ensky. Pero durante dos días, cuando el intento de un golpe militar de Kerensky fue usurpado por un golpe militar efectivo de la derecha monárquica de Kornilov contra Kerensky, los bolcheviques en esos dos días convirtieron a Kornilov en el enemigo principal, sin apoyar al kirchnerista Kerensky. La derrota de Kornilov preparó el derrocamiento de Kerensky. Lo mismo hicimos nosotros con Isabel. Durante dos años, combatimos al gobierno peronista que creó las tres A, produjo el navarrazo en Córdoba, liquidó a la izquierda peronista y asaltó la UOM y la ciudad de Villa Constitución – mientras el resto del arco político armaba un bloque, primero de los 8 y luego de los 9, para defender la ‘institucionalización’ contra un golpe militar. A partir de julio de 1975, con el nombramiento de Videla, produjimos un cambio de orientación, y levantamos la consigna “abajo el golpe&rdquo! ;, mientras que los que antes advertían contra el golpe, ahora lo desechaban debido a la asunción de un ‘general democrático’. Pero mientras nosotros, Política Obrera, convertíamos al golpe militar en el ‘enemigo principal’, el gobierno de Isabel hacía lo contrario: atacaba como su ‘enemigo principal’ a los luchadores, y abría aún más, por esta vía, el camino para la victoria del golpe militar.
La ‘izquierda nacional’ dio todo su apoyo político al gobierno de Isabel y con ello a la política de capitulación frente a los golpistas. En el caso del gobierno de Illia fue incluso peor, porque el peronismo y la ‘izquierda nacional’ apoyaron el golpe de Onganía, sea en directo o con el llamado a ‘desensillar hasta que aclare’. La"izquierda nacional" y Ramos llegaron a pedirle una definición "nacional" a la dictadura (“De la crisis argentina a un frente patriótico”, folleto de octubre 1978) y caracterizaron más tarde como "militares patrióticos al estilo de Perón" a Seineldín y Rico - éste milita hoy en las filas K. La ‘izquierda nacional’, que también apoyó al entreguista Frondizi y que sólo se opuso de palabra a la Libertadora, no tiene autoridad para darle lecciones al Partido Obrero.
Galasso aprovecha la ignorancia de su público para reivindicar un apoyo de la ‘izquierda nacional’ al 17 de octubre, lo cual es cierto para el periódico Frente Obrero, pero donde no estaba Abelardo Ramos, el cual en su revista Octubre lo caracterizó, por el contrario, como una lucha interburguesa (“un forcejeo por el gobierno dentro de las clases poseedoras de nuestro país…dentro del cual actuó dividido el proletariado”) (revista Octubre N° 1, noviembre de 1945). Abelardo Ramos no terminó al lado de Menem por casualidad; a Menem también lo votó Galasso en 1989 – siempre con el argumento del ‘enemigo principal’, el UCR Raúl Angeloz, y de la inmadurez de la lucha de clases para luchar por el desarrollo de una oposición de clase socialista. Los campeones de ocupar uno de los campos en disputa, rechazan ! hacer eso cuando se trata de la lucha de los Mariano Ferreyra contra los Pedraza – y se ponen por encima del muro hablando de un “enfrentamiento”.
Galasso sabe que, al menos en los 60, el más conocido divulgador del tema de las contradicciones, fue Mao Tsetung. Los divulgadores de Mao se encargaron de divulgar, a su vez, la especie del enemigo principal, cuya versión es de origen más antiguo, pues fue el eufemismo del stalinismo para justificar los frentes populares contra ‘la derecha’. Pero en ese opúsculo vulgar, Mao toma sus precauciones; dice por ejemplo que, en ciertas ocasiones, la contradicción secundaria podía transformarse en la principal. Sabía de lo que hablaba: en dos décadas de “guerra prolongada”, el ejército rojo de Mao había pasado 15 años en una guerra civil contra su ‘enemigo secundario’ – el nacionalista Kuomintang de ChiangKaisek; los otros cinco contra el militarismo japon&eacut! e;s, aunque combinado con choques reiterados con sus rivales kirchneristas de China. Visto el resultado final – la victoria de la revolución china – se debe concluir que sin la guerra civil contra los nac& pop del Kuomintang las masas chinas hubieran terminado en la derrota. Mao desarrolló esta orientación en el peor momento de “la lucha de clases’ (como le gusta a Galasso), cuando tuvo que recorrer diez mil kilómetros a pie para escapar de sus perseguidores kirchneristas, o sea, los representantes de la burguesía nacional de China.
Puede ser que el gobierno de CFK esté ocupando el segundo lugar en la tabla de posiciones de los ‘enemigos’ de los explotados – con Macri o de De Narváez disputando el primero y segundo puesto con Duhalde. Pero a diferencia de éstos es el gobierno, es decir, el gerente de los negocios capitalistas y el encargado de proteger las relaciones de explotación existentes. Esto lo transforma de secundario en principal; un obrero no puede reclamar al pelirrojo o a Carrió, y sólo en un espacio limitado a Mauricio. El que no lucha contra el gobierno de turno no lucha contra el poder; orientar a las masas contra la oposición parlamentaria no les rendiría nada, por eso tampoco les interesa. Solamente en una crisis de poder se plantea la necesidad de distinguir a los campos que se disputan su resultado; en este c! aso, solamente en éste, hay que distinguir al enemigo, del enemigo de nuestro enemigo, y enfilar las baterías contra el primero – sin apoyar políticamente al segundo. La ‘izquierda nacional’, por el contrario, se ha integrado a uno de los campos burgueses de un modo estratégico, hasta la última gota de la cicuta – por eso acompañó a Perón, los bolivianos Paz Estensoro y Siles Suazo, los peruanos Haya de la Torre y Alan García, Frondizi, Isabel, hasta la completa capitulación de éstos ante el imperialismo. Siguiendo la metáfora de la niña de 20 años que Galasso quiere enamorar aunque a los 60 ella pueda quedarse sin dientes, los ejemplos advierten que mucho antes de desdentarse la damisela nacional y popular se convertirá en prostituta.
El kirchnerismo
El gobierno kirchnerista es el síndico de la quiebra de 2002: vino a pagar las deudas del menemismo y de la dictadura. O sea, a rescatar el capitalismo, no a transformar las relaciones sociales capitalistas que llevaron a la quiebra. No es menos cipayo sino más, el gobierno que paga la deuda usuraria, que aquél que la contrajo. Los K la renegociaron a partir de los niveles usureros que alcanzó en 2000/1, incluidos sus intereses. Fue el eje de la reestructuración capitalista del país, en los términos que lo dejó Duhalde-Lavagna. Mantuvo con fórceps (subsidios) el régimen de privatizaciones y todas las formas de trabajo precario y en negro. La Bolsa llegó al tope; se expandió la frontera territorial y financiera de la explotación latifundista de la soja. Galasso saluda la reestatización de! las AFJP, pero sin la advertencia que hicimos nosotros – que sería usada para pagar a la usura internacional. La Anses es ahora una AFJP estatal, pues se rige por un sistema de capitalización, no de reparto, y el dinero se invierte en la compra de títulos de la deuda pública. Kirchner hizo lo que ningún capitalista hubiera imaginado en sus menores sueños: pagar la deuda externa al extremo de reducir su parte flotante, del 200% al 18% del PBI, mediante el recurso de enchufársela a la Anses, al Pami, a la AFIP y al Banco Central.
Se ha ejecutado la mayor confiscación económica del pueblo de toda la historia: el próximo default se lleva puesto, no a los acreedores extranjeros, que de todos modos siempre son rescatados, sino a los jubilados y a la moneda nacional. Gracias a esto, empieza ahora un nuevo ciclo de endeudamiento, que ha arrancado por las provincias y por el sector privado. Los capitales extranjeros invaden la Bolsa y los títulos públicos; esto significa, políticamente, que este es su gobierno – sin atarse las manos para cualquiera que ofrezca ir más lejos. Ningún capitalista quiere destituir a un gobierno al que le compra la deuda. Agreguemos a esto la ley antiterrorista que los K hicieron votar al Congreso a pedido de Bush, que proscribe a cualquier organización que se solidarice en forma efectiva con las luchas nacionales de otros pueblos; o el alineamiento co! n el sionismo frente a Irán – y vemos que Galasso está alineado con los peores intereses del imperialismo. Ah!, la ley de medios, volcada a los intereses de los pulpos de la telefonía y al alcahueterismo oficial de los que encubren a Pedraza; o la asignación por hijo, promovida por el Banco Mundial, que consolida un régimen de exclusión social por referencia al derecho al trabajo, y que pagan los jubilados de la Anses – y hasta por último algunas concesiones sociales o legales, sin las cuales un gobierno del gran capital no podría gobernar ni por un instante en un sistema democrático-electoral. El gobierno actual es el de los mayores pulpos mineros y petroleros y de los banqueros – los que más han lucrado con la valorización de la deuda pública; del gran capital financiero sojero-exportador; de las privatizadas; y del juego. ¿Por qué diablos un partido socialista no! debiera combatirlo?
A Galasso le parece desacertado caracterizar el conflicto por las retenciones de soja como interburgués – quiere decir con esto que hacemos abstracción de cuál posición era más conveniente para el desarrollo nacional. Pues, precisamente, nuestra posición fue: ninguna. A la defensa de la tasa de ganancia agraria de los sojeros, de un lado, se opuso la defensa del pago de la deuda externa, del otro. El fracaso del gobierno en este conflicto, lo llevó a recapturar los fondos de las AFJP para evitar el default y pagar la deuda. Luego hizo lo mismo con las reservas del Banco Central; no existe una posición progresiva entre la renta agraria y la renta financiera.
A Galasso lo atormenta, sin embargo, la reelección. ¿Che, Altamira, querés que ganen los Duhalde-Macri? “No te enojés si te lo dicen”, agrega, con ese histrionismo recogido de los bajos fondos. Es el penúltimo bastión argumental de los Galasso. Pero si CFK pierde no será por los recursos que exhiben sus ‘destituyentes’ ni por el Partido Obrero – sino porque es ‘funcional’ a los Pedraza, a los banqueros, a los pulpos mineros, etc., y a la desorganización económica que resulta de jugarse por esos intereses. Pero ¿qué sería la reelección de Cristina, Galasso? Sería la reelección del protector de los terratenientes bonaerenses, Scioli; de los Gioja, los Insfrán, de los representantes del gran capital automotriz y de la enseñanza religiosa, como los Sc! hiaretti o hasta la ‘rentrée’ de Reutemann. Estos derechistas sin recuperación, se convertirían en los sucesores de CFK. Nadie que no haya caído en una profunda bancarrota política puede plantear una línea como la de Galasso.
El Partido Obrero
El último argumento de Galasso es que “la lucha de clases” (Galasso insiste en esta expresión cuanto más aboga por la colaboración de clases) no ofrece ninguna oportunidad a la izquierda; hay que conformarse con lo que hay. Los kirchneristas no van más lejos, porque la ‘lucha de clases’ no da; la culpa no la tiene ninguna fuerza política, sino la abstracción ‘lucha de clases’. Pero si este es el caso, ¿qué le están ofreciendo a esa ‘juventud maravillosa’ que acaban de descubrir los colegas de Galasso, de Carta Abierta? Resignación, acomodamiento, cooptación, corruptela y cinismo político. Galasso tuvo la muy mala suerte de vender su carne podrida contra Altamira y el PO cuando las masas bolivianas se estaban alzando contra el gobierno kirchnerista de Bolivia, que acaba de adoptar el programa de la derecha y recib! ir su apoyo político. Pero este alzamiento, como otros tantos en Europa y en Asia, son la expresión de la tendencia de los explotados frente a la bancarrota mundial del capitalismo, que se desarrolla a la vista de todos, provocando una degradación social sin precedentes. En estas condiciones históricas, que necesariamente comportan una transición entre situaciones no revolucionarias y revolucionarias, nuestro partido desarrolla una organización obrera y socialista, que sería imposible sin el desenmascaramiento del ahora sí definitivamente desdentado nacionalismo burgués. ¿Por qué el gobierno ha puesto en marcha todos los recursos del Estado, incluidos los paraestatales de la patota, por un lado, y de los escribas cortesanos, por el otro, contra nuestro partido, el Partido Obrero; por qué nos han convertido en su ENEMIGO PRINCIPAL , si no es, precisamente, porque temen como a la muerte la emancipación política de la clase obrera?
ABAJO EL PACTO CFK-PEDRAZA, fuera la patota de los ferrocarriles y de los sindicatos.
Juicio y castigo a TODOS los culpables del asesinato de nuestro compañero Mariano Ferreyra.
Jorge Altamira
7 de enero de 2011
No sorprende que el historiador Norberto Galasso se sume a la campaña macartista desatada por el gobierno nacional y sus cortesanos para criminalizar al Partido Obrero y para combatirlo, como dice uno de sus escribas, “con el Código Penal” – la primera manifestación concreta de la ‘nueva’ política de “seguridad democrática”, para enfrentar la movilización social, que le sopló al oído la estirpe de los Verbitsky a la nueva ministra de Seguridad. En una ‘carta’ que fue difundida en forma instantánea y profusa, en su mayor parte por los ‘blogs’ alcahuetes del oficialismo (que seguramente no harán lo mismo con esta respuesta), Galasso no pronuncia dos frases inevitables en la boca de cualquier luchador: “la patota de Pedraza” y “j! uicio y castigo a TODOS los culpables”. Al revés: “puede caer sobre vos”, dice Galasso, en referencia a Altamira, “la responsabilidad de lo que ocurra a militantes que son víctimas de enfrentamientos como los que hemos visto”. Se trata, ojo, de una amenaza – claro, desde el campo popular, que no formula al pasar sino que repite: “pensá, nos dice, en los pibes que podés arriesgar”. ¿Este hombre sospecha siquiera el nivel de su bancarrota política y hasta de su bajeza? Estamos en peligro, no por las patotas de Pedraza, Maturano, West Ocampo, Gerardo Martínez, Guillermo Moreno, el ‘caballo’ Suárez, Capaccioli, Otacehé, la policía de Barracas y Avellaneda, la de Soldati, la de Primavera en Formosa, sino por los piquetes ferroviarios, o, para el caso, todos los piquetes de todos los luchadores, y de activistas como Mariano Ferreyra. No hay que purg! ar al poder político de estas mafias, sino desencadenar una campaña macartista contra el PO. Galasso no llega siquiera a formular una teoría de los dos demonios – para él y los otros cortesanos el demonio es uno solo. Si nosotros somos los responsables del asesinato de nuestro compañero, la patota de Pedraza es un asunto secundario.
Galasso va más lejos todavía: respalda la tesis de los abogados defensores de los asesinos – el “enfrentamiento” – que fue refutada sin atenuantes, tanto por la jueza de primera instancia como luego por los tres jueces de la Cámara del Crimen. ¿No te has dado cuenta, Galasso, del pozo de inmundicia en el que has caído? Galasso cierra de este modo el círculo de la campaña de criminalización que inició, el mismo 20 de octubre, la Presidenta de la Nación, cuando responsabilizó por el crimen a “los que usan palos en las manifestaciones” y “a los estudiantes que forzaron la puerta del Consejo Nacional de Educación”. Después de esto, vinieron las diatribas del tipo “el PO le tiró un muerto al gobierno nacional y popular”, “los troscos son funcionales a Duhalde&rdqu! o; – algo de lo que no se acordaron cuando Kirchner fue llevado de la mano a la Presidencia por el responsable político de los asesinatos de Kosteki y Santillán – que de paso le impuso más de medio gabinete, incluida la mayor parte de los actuales ministros, intendentes y punteros. Después del asesinato de Mariano, el kirchnerista Insfrán se cobró la vida de dos campesinos formoseños tobas, y la policía del jefe nombrado por Néstor Kirchner y la Metropolitana la de dos pobladores de Villa Soldati. Ni las policías, ni Insfrán están imputados; al revés, el gobierno apoya la reelección del formoseño y acabó firmando un pacto con Macri para castigar con la privación de derechos sociales la lucha de los pobladores por la vivienda.
Si el asesinato de Mariano Ferreyra obedeció a la necesidad de defender las tercerizaciones –un régimen de superexplotación para beneficiar a los grandes capitales -, la de los tobas fue ‘funcional’ a los intereses de los terratenientes sojeros y la de Soldati a la especulación inmobiliaria en la Ciudad. En lugar de lanzar la alarma acusadora: ¿A dónde vas Cristina? o la advertencia preventiva: ¿A dónde te estás dejando llevar?, Galasso apunta contra ‘el enemigo principal’, que es, según él mismo, la prioridad que debe tener cualquier ataque político – Altamira y el Partido Obrero. Nos ha convertido en el ‘enemigo principal’ – a nosotros, no a Pedraza. Este es el significado sin falacias que tiene su frase introductoria, en la que asegura tener con Altamira” un punto teór! ico (sic) común: …crear la sociedad solidaria, igualitaria, donde brote y se consolide el Hombre Nuevo”. En realidad, nos quiere aplicar el Código Penal. ¿Qué patraña, no?
Galasso califica a nuestros militantes jóvenes como pibes, no por un acto de cariño sino para despreciar la madurez que han alcanzado y la conciencia que tienen de sus propios actos. En cambio, La Cámpora, que homenajeó a Insfrán en las vísperas del asesinato de los tobas, o la Juventud Sindical de triste memoria, que festejó con CFK en River pocas horas antes del asesinato de Mariano, son para él una juventud maravillosa. La 'carta' de Galasso es una provocación en cada línea y un monumento al caradurismo.
Encubrir a los Pedraza
Galasso no se aparta del encubrimiento de la patota que asesinó a Mariano Ferreyra en ningún momento de su texto. Galasso repite la versión de que “las bandas de derecha” procedieron al saqueo de la estación Constitución, aunque, una a favor de él, se abstiene en este caso de acusarnos a nosotros mismos por esos saqueos, claro que sin denunciar que eso es lo que hizo su ministra Nilda Garré y su compañero de ruta (¿ocasional?) Horacio Verbitsky – ninguno de los cuales apoyó sus infamias en la sede judicial. En cambio, sí lo hizo Juan Pablo Schiavi, secretario de transportes y jefe de del subsecretario Antonio Luna-hombre de Maturano y de Pedraza, quien acusó por los hechos de Constitución a nuestros militantes ferroviarios en el juzgado que dispuso procesarlos por el corte de vías de Avellaneda.
Si es como dice Galasso, ¿por qué no hay ningún imputado por los desmanes de Constitución, cuando el diario La Nación publicó fotos de sus actores y existen los monitores propios de la estación? ¿No pensaste en esto Galasso – al menos en las noches, cuando “el músculo duerme y la ambición descansa”? Pero el encubrimiento de lo ocurrido en Constitución, por parte de la camarilla de la ‘seguridad democrática’, es decir del Código Penal y de los gases vomitivos, obedece a una razón simple: los desmanes fueron armados por la patota de la burocracia ferroviaria, con la intención de revertir la posibilidad de la prisión preventiva para los siete acusados por el asesinato de Mariano, como ya se había expresado antes, pero que a Galasso lo tiene sin cuidado, en los paros! de la Fraternidad para “liberar a los presos” y en ‘asambleas’ armadas por la UF en Temperley con el mismo slogan.
Galasso se mofa, con el mismo estilo antiobrero de la prensa ‘destituyente’ (que ahora copia la oficialista) de un corte de “20 muchachos rebeldes”, para ningunear, como lo hace la derecha, la reivindicación del corte: el cese de los despidos y de las tercerizaciones – que reclaman miles y miles en el ferrocarril. Despidos y tercerizaciones que expresan la explotación acrecentada del capital sobre el trabajo y el despojo de los obreros por la burocracia sindical. ¡Pero qué carajo le puede importar esto a la “izquierda nacional”! Los 250 compañeros que cortaron las vías dejaron al desnudo que el gobierno maravilloso de Galasso no estaba cumpliendo -y sigue sin cumplir- las actas de incorporación a planta permanente de los tercerizados. Pero el gobierno incumple lo firmado porque tiene una asociación política y económica con esa burocracia, que por ello es un enorme factor de poder en el gobierno nac& pop. Galasso repite como un loro el verso de todo el oficialismo de que, ‘naturalmente’, a este gobierno fabuloso “le quedan muchas cuentas pendientes, mucho para hacer” (la contraseña para la reelección). Si fuera así (admitamos tal cosa por un momento), ¿por qué no pone manos a la obra y echa a los Pedraza de la gestión del ferrocarril, los echa de la secretaría de Transporte, expulsa a los capitalistas coimeros de Ugofe y pone al ferrocarril bajo administración estatal directa, con control de delegados obreros electos? Pero esto que el gobierno no hace, ni ha dicho que vaya a hacer, tampoco lo reclaman Galasso y sus compinches de la corte oficial: avalan la continuidad de la patota en uno de los principales núcleos de poder y al frente de uno de los ejemplos de mayor corrupción económica y desfalco de los fondos nacionales. Galasso es un simple encubridor que se disfraza con la muletilla de “la contradicción principal”. Los Pedraza son parte del poder kirchnerista – y no en pequeña medida. Galasso quiere un Hombre Nuevo pero no un ferroviario mejor pago, que trabaje en condiciones menos inhumanas. Galasso: volvé a leer tu ‘carta’ y ponete a llorar. Pero después de todo: ¿la ‘izquierda nacional’ no apoyó toda la vida a la burocracia sindical – incluso en los criminales años 70?
El “enemigo principal”
Todo este desvergonzado embuste, que lo coloca en el campo de los encubridores del asesinato de nuestro compañero Mariano y en el de los enemigos de los obreros ferroviarios, Galasso lo justifica con la tesis del “enemigo principal”; hay que apoyar a CFK (y por sobre todo su reelección) para que no triunfe el ‘enemigo principal’, la derecha. En realidad estamos ante un embuste, porque en ningún momento Galasso caracteriza a CFK como un enemigo de clase, aún ‘secundario’, de los trabajadores, ni tampoco propone, bajo ninguna forma, desarrollar una organización clasista que combata al gobierno - al menos como enemigo de clase ‘secundario’.Después de todo, el objetivo de un socialista que combate al ‘enemigo principal’ no es fortalecer al ‘enemigo secundario’, que! por secundario que sea es un enemigo de clase, sino aprovechar el debilitamiento del frente de clase en su conjunto que implica una derrota del ‘enemigo principal’, para acabar con la dominación de clase en general. En definitiva, en lugar de plantear alguna forma de oposición de clase al gobierno capitalista ‘secundario’, o de correlacionar la lucha contra el enemigo de clase ‘principal’ con la oposición a todo gobierno de clase de la burguesía,
Galasso dedica sus esfuerzos a amenazar a nuestros ‘pibes’ con futuros ‘pedrazazos’, es decir, a valerse de los Pedraza como muro de defensa del gobierno kirchnerista. Como ocurre en política con los francotiradores, Galasso se pone al servicio de todas las provocaciones. Precisamente, es una provocación, que Galasso no denuncia ni podría denunciar, el fallo que procesó a nuestros compañeros ferroviarios por “extorsión”, con motivo del corte de vías de Avellaneda, porque convierte a esa condición a cualquier demanda reivindicativa que se apoya en medidas de acción directa efectiva. CFK ha logrado su propósito inicial de criminalizar (código penal) a nuestro partido. Un juez que califica de ‘extorsión’ a una demanda dirigida a una persona ideal, no física, como el Ministeri! o de Trabajo, no pudo haber actuado de este modo sin que mediara una exigencia del poder político.
El más ‘célebre’ modo de uso de la tesis de la contradicción principal, la ofreció el partido comunista en 1976 cuando llamó a apoyar a la dictadura militar, con la consideración de que el ‘enemigo principal’ eran los Suárez Mason y Menéndez, caracterizados como pinochetistas, frente a Videla. Es el mismo método que aplica Galasso: fuera del análisis concreto de una situación concreta, siempre hay algún villano al que se puede imputar la condición de ‘enemigo principal’ y, por esta vía, absolver de culpas al enemigo que le sigue en jerarquía. En el ejemplo clásico de la revolución rusa, nadie puede cuestionar que el ‘enemigo principal’, durante 250 días seguidos menos dos, fue el gobierno kirchnerista ruso de Ker! ensky. Pero durante dos días, cuando el intento de un golpe militar de Kerensky fue usurpado por un golpe militar efectivo de la derecha monárquica de Kornilov contra Kerensky, los bolcheviques en esos dos días convirtieron a Kornilov en el enemigo principal, sin apoyar al kirchnerista Kerensky. La derrota de Kornilov preparó el derrocamiento de Kerensky. Lo mismo hicimos nosotros con Isabel. Durante dos años, combatimos al gobierno peronista que creó las tres A, produjo el navarrazo en Córdoba, liquidó a la izquierda peronista y asaltó la UOM y la ciudad de Villa Constitución – mientras el resto del arco político armaba un bloque, primero de los 8 y luego de los 9, para defender la ‘institucionalización’ contra un golpe militar. A partir de julio de 1975, con el nombramiento de Videla, produjimos un cambio de orientación, y levantamos la consigna “abajo el golpe&rdquo! ;, mientras que los que antes advertían contra el golpe, ahora lo desechaban debido a la asunción de un ‘general democrático’. Pero mientras nosotros, Política Obrera, convertíamos al golpe militar en el ‘enemigo principal’, el gobierno de Isabel hacía lo contrario: atacaba como su ‘enemigo principal’ a los luchadores, y abría aún más, por esta vía, el camino para la victoria del golpe militar.
La ‘izquierda nacional’ dio todo su apoyo político al gobierno de Isabel y con ello a la política de capitulación frente a los golpistas. En el caso del gobierno de Illia fue incluso peor, porque el peronismo y la ‘izquierda nacional’ apoyaron el golpe de Onganía, sea en directo o con el llamado a ‘desensillar hasta que aclare’. La"izquierda nacional" y Ramos llegaron a pedirle una definición "nacional" a la dictadura (“De la crisis argentina a un frente patriótico”, folleto de octubre 1978) y caracterizaron más tarde como "militares patrióticos al estilo de Perón" a Seineldín y Rico - éste milita hoy en las filas K. La ‘izquierda nacional’, que también apoyó al entreguista Frondizi y que sólo se opuso de palabra a la Libertadora, no tiene autoridad para darle lecciones al Partido Obrero.
Galasso aprovecha la ignorancia de su público para reivindicar un apoyo de la ‘izquierda nacional’ al 17 de octubre, lo cual es cierto para el periódico Frente Obrero, pero donde no estaba Abelardo Ramos, el cual en su revista Octubre lo caracterizó, por el contrario, como una lucha interburguesa (“un forcejeo por el gobierno dentro de las clases poseedoras de nuestro país…dentro del cual actuó dividido el proletariado”) (revista Octubre N° 1, noviembre de 1945). Abelardo Ramos no terminó al lado de Menem por casualidad; a Menem también lo votó Galasso en 1989 – siempre con el argumento del ‘enemigo principal’, el UCR Raúl Angeloz, y de la inmadurez de la lucha de clases para luchar por el desarrollo de una oposición de clase socialista. Los campeones de ocupar uno de los campos en disputa, rechazan ! hacer eso cuando se trata de la lucha de los Mariano Ferreyra contra los Pedraza – y se ponen por encima del muro hablando de un “enfrentamiento”.
Galasso sabe que, al menos en los 60, el más conocido divulgador del tema de las contradicciones, fue Mao Tsetung. Los divulgadores de Mao se encargaron de divulgar, a su vez, la especie del enemigo principal, cuya versión es de origen más antiguo, pues fue el eufemismo del stalinismo para justificar los frentes populares contra ‘la derecha’. Pero en ese opúsculo vulgar, Mao toma sus precauciones; dice por ejemplo que, en ciertas ocasiones, la contradicción secundaria podía transformarse en la principal. Sabía de lo que hablaba: en dos décadas de “guerra prolongada”, el ejército rojo de Mao había pasado 15 años en una guerra civil contra su ‘enemigo secundario’ – el nacionalista Kuomintang de ChiangKaisek; los otros cinco contra el militarismo japon&eacut! e;s, aunque combinado con choques reiterados con sus rivales kirchneristas de China. Visto el resultado final – la victoria de la revolución china – se debe concluir que sin la guerra civil contra los nac& pop del Kuomintang las masas chinas hubieran terminado en la derrota. Mao desarrolló esta orientación en el peor momento de “la lucha de clases’ (como le gusta a Galasso), cuando tuvo que recorrer diez mil kilómetros a pie para escapar de sus perseguidores kirchneristas, o sea, los representantes de la burguesía nacional de China.
Puede ser que el gobierno de CFK esté ocupando el segundo lugar en la tabla de posiciones de los ‘enemigos’ de los explotados – con Macri o de De Narváez disputando el primero y segundo puesto con Duhalde. Pero a diferencia de éstos es el gobierno, es decir, el gerente de los negocios capitalistas y el encargado de proteger las relaciones de explotación existentes. Esto lo transforma de secundario en principal; un obrero no puede reclamar al pelirrojo o a Carrió, y sólo en un espacio limitado a Mauricio. El que no lucha contra el gobierno de turno no lucha contra el poder; orientar a las masas contra la oposición parlamentaria no les rendiría nada, por eso tampoco les interesa. Solamente en una crisis de poder se plantea la necesidad de distinguir a los campos que se disputan su resultado; en este c! aso, solamente en éste, hay que distinguir al enemigo, del enemigo de nuestro enemigo, y enfilar las baterías contra el primero – sin apoyar políticamente al segundo. La ‘izquierda nacional’, por el contrario, se ha integrado a uno de los campos burgueses de un modo estratégico, hasta la última gota de la cicuta – por eso acompañó a Perón, los bolivianos Paz Estensoro y Siles Suazo, los peruanos Haya de la Torre y Alan García, Frondizi, Isabel, hasta la completa capitulación de éstos ante el imperialismo. Siguiendo la metáfora de la niña de 20 años que Galasso quiere enamorar aunque a los 60 ella pueda quedarse sin dientes, los ejemplos advierten que mucho antes de desdentarse la damisela nacional y popular se convertirá en prostituta.
El kirchnerismo
El gobierno kirchnerista es el síndico de la quiebra de 2002: vino a pagar las deudas del menemismo y de la dictadura. O sea, a rescatar el capitalismo, no a transformar las relaciones sociales capitalistas que llevaron a la quiebra. No es menos cipayo sino más, el gobierno que paga la deuda usuraria, que aquél que la contrajo. Los K la renegociaron a partir de los niveles usureros que alcanzó en 2000/1, incluidos sus intereses. Fue el eje de la reestructuración capitalista del país, en los términos que lo dejó Duhalde-Lavagna. Mantuvo con fórceps (subsidios) el régimen de privatizaciones y todas las formas de trabajo precario y en negro. La Bolsa llegó al tope; se expandió la frontera territorial y financiera de la explotación latifundista de la soja. Galasso saluda la reestatización de! las AFJP, pero sin la advertencia que hicimos nosotros – que sería usada para pagar a la usura internacional. La Anses es ahora una AFJP estatal, pues se rige por un sistema de capitalización, no de reparto, y el dinero se invierte en la compra de títulos de la deuda pública. Kirchner hizo lo que ningún capitalista hubiera imaginado en sus menores sueños: pagar la deuda externa al extremo de reducir su parte flotante, del 200% al 18% del PBI, mediante el recurso de enchufársela a la Anses, al Pami, a la AFIP y al Banco Central.
Se ha ejecutado la mayor confiscación económica del pueblo de toda la historia: el próximo default se lleva puesto, no a los acreedores extranjeros, que de todos modos siempre son rescatados, sino a los jubilados y a la moneda nacional. Gracias a esto, empieza ahora un nuevo ciclo de endeudamiento, que ha arrancado por las provincias y por el sector privado. Los capitales extranjeros invaden la Bolsa y los títulos públicos; esto significa, políticamente, que este es su gobierno – sin atarse las manos para cualquiera que ofrezca ir más lejos. Ningún capitalista quiere destituir a un gobierno al que le compra la deuda. Agreguemos a esto la ley antiterrorista que los K hicieron votar al Congreso a pedido de Bush, que proscribe a cualquier organización que se solidarice en forma efectiva con las luchas nacionales de otros pueblos; o el alineamiento co! n el sionismo frente a Irán – y vemos que Galasso está alineado con los peores intereses del imperialismo. Ah!, la ley de medios, volcada a los intereses de los pulpos de la telefonía y al alcahueterismo oficial de los que encubren a Pedraza; o la asignación por hijo, promovida por el Banco Mundial, que consolida un régimen de exclusión social por referencia al derecho al trabajo, y que pagan los jubilados de la Anses – y hasta por último algunas concesiones sociales o legales, sin las cuales un gobierno del gran capital no podría gobernar ni por un instante en un sistema democrático-electoral. El gobierno actual es el de los mayores pulpos mineros y petroleros y de los banqueros – los que más han lucrado con la valorización de la deuda pública; del gran capital financiero sojero-exportador; de las privatizadas; y del juego. ¿Por qué diablos un partido socialista no! debiera combatirlo?
A Galasso le parece desacertado caracterizar el conflicto por las retenciones de soja como interburgués – quiere decir con esto que hacemos abstracción de cuál posición era más conveniente para el desarrollo nacional. Pues, precisamente, nuestra posición fue: ninguna. A la defensa de la tasa de ganancia agraria de los sojeros, de un lado, se opuso la defensa del pago de la deuda externa, del otro. El fracaso del gobierno en este conflicto, lo llevó a recapturar los fondos de las AFJP para evitar el default y pagar la deuda. Luego hizo lo mismo con las reservas del Banco Central; no existe una posición progresiva entre la renta agraria y la renta financiera.
A Galasso lo atormenta, sin embargo, la reelección. ¿Che, Altamira, querés que ganen los Duhalde-Macri? “No te enojés si te lo dicen”, agrega, con ese histrionismo recogido de los bajos fondos. Es el penúltimo bastión argumental de los Galasso. Pero si CFK pierde no será por los recursos que exhiben sus ‘destituyentes’ ni por el Partido Obrero – sino porque es ‘funcional’ a los Pedraza, a los banqueros, a los pulpos mineros, etc., y a la desorganización económica que resulta de jugarse por esos intereses. Pero ¿qué sería la reelección de Cristina, Galasso? Sería la reelección del protector de los terratenientes bonaerenses, Scioli; de los Gioja, los Insfrán, de los representantes del gran capital automotriz y de la enseñanza religiosa, como los Sc! hiaretti o hasta la ‘rentrée’ de Reutemann. Estos derechistas sin recuperación, se convertirían en los sucesores de CFK. Nadie que no haya caído en una profunda bancarrota política puede plantear una línea como la de Galasso.
El Partido Obrero
El último argumento de Galasso es que “la lucha de clases” (Galasso insiste en esta expresión cuanto más aboga por la colaboración de clases) no ofrece ninguna oportunidad a la izquierda; hay que conformarse con lo que hay. Los kirchneristas no van más lejos, porque la ‘lucha de clases’ no da; la culpa no la tiene ninguna fuerza política, sino la abstracción ‘lucha de clases’. Pero si este es el caso, ¿qué le están ofreciendo a esa ‘juventud maravillosa’ que acaban de descubrir los colegas de Galasso, de Carta Abierta? Resignación, acomodamiento, cooptación, corruptela y cinismo político. Galasso tuvo la muy mala suerte de vender su carne podrida contra Altamira y el PO cuando las masas bolivianas se estaban alzando contra el gobierno kirchnerista de Bolivia, que acaba de adoptar el programa de la derecha y recib! ir su apoyo político. Pero este alzamiento, como otros tantos en Europa y en Asia, son la expresión de la tendencia de los explotados frente a la bancarrota mundial del capitalismo, que se desarrolla a la vista de todos, provocando una degradación social sin precedentes. En estas condiciones históricas, que necesariamente comportan una transición entre situaciones no revolucionarias y revolucionarias, nuestro partido desarrolla una organización obrera y socialista, que sería imposible sin el desenmascaramiento del ahora sí definitivamente desdentado nacionalismo burgués. ¿Por qué el gobierno ha puesto en marcha todos los recursos del Estado, incluidos los paraestatales de la patota, por un lado, y de los escribas cortesanos, por el otro, contra nuestro partido, el Partido Obrero; por qué nos han convertido en su ENEMIGO PRINCIPAL , si no es, precisamente, porque temen como a la muerte la emancipación política de la clase obrera?
ABAJO EL PACTO CFK-PEDRAZA, fuera la patota de los ferrocarriles y de los sindicatos.
Juicio y castigo a TODOS los culpables del asesinato de nuestro compañero Mariano Ferreyra.
Jorge Altamira
7 de enero de 2011
6 ene 2011
POR LA REINCORPORACON INMEDIATA DE LOS VEINTISIETE DOCENTES DESPEDIDOS
Colegio Nacional Buenos Aires
Por la reincorporación inmediata de los veintisiete docentes despedidos
La Asociación Gremial Docente (AGD) de la UBA ha reclamado en el día de ayer una reunión al Rectorado de la UBA y a la Rectora del Colegio Nacional Buenos Aires (CNBA) para exigir la inmediata reincorporación de los veintisiete docentes despedidos de esa Institución, quienes hasta el 31 de diciembre venían desempeñándose en sus tareas.
La resolución vulnera elementales derechos laborales como la estabilidad y el salario, y forma parte de una política de sistemático ataque que comenzó con la intervención del CNBA y cerró el año pasado con la imposición de un candidato a Rector que fue recusado por la mayoría de la comunidad docente, estudiantil, de graduados y padres del Colegio.
La AGD UBA advierte que, de mantenerse esta medida, está en serio riesgo el inicio de las actividades académicas en el Colegio.
Reproducimos a continuación la siguiente declaración de la Comisión Directiva de AGD Pellegrini, el Centro de Estudiantes y la Comisión Interna No docente.
NO A LOS DESPIDOS EN EL CNBA
La Comisión directiva de AGD PELLEGRINI, la conducción del CECAP y la Comisión Interna No Docente manifestamos nuestro más enérgico repudio a las medidas tomadas por las autoridades del CNBA el último 29 de diciembre. Dichas autoridades elegidas antidemocráticamente y funcionales a las politicas del Consejo Superior han despedido 27 trabajadores no renovándoles contratos y reasignando tareas y categorías a otros.
EXIGIMOS LA INMEDIATA REINCORPORACIÓN DE TODOS LOS DOCENTES ILEGAL E ILEGÍTIMAMENTE DESPEDIDOS.
ALERTAMOS A TODA LA COMUNIDAD SOBRE ESTA GRAVISIMA DECISIÓN QUE VUELVEN A IMPONER PRÁCTICAS AUTORITARIAS DE ÉPOCAS ANTERIORES.
REAFIRMAMOS NUESTRO COMPROMISO CON LA ESTABILIDAD LABORAL Y CARRERA DOCENTE DEMOCRÁTICAMENTE ACORDADA.
ADVERTIMOS QUE SI TODOS LOS DOCENTES NO SON RESTITUIDOS EN SUS CARGOS SE TOMARAN MEDIDAS DE ACCIÓN DIRECTA E IDÉNTICA RESPUESTA SE TENDRÁ FRENTE A CUALQUIER CASO EN QUE SE PRETENDA AVASALLAR LOS DERECHOS DE LOS TRABAJA DORES.
CONVOCAMOS A LA COMUNIDAD DE AMBAS ESCUELAS A MANIFESTARSE FRENTE A UN NUEVO E INACEPTABLE ATROPELLO.
Comisión Directiva AGD-Pellegrini, Comisión Interna No Docente Pellegrini, Conducción Centro de estudiantes del Pellegrini
Por la reincorporación inmediata de los veintisiete docentes despedidos
La Asociación Gremial Docente (AGD) de la UBA ha reclamado en el día de ayer una reunión al Rectorado de la UBA y a la Rectora del Colegio Nacional Buenos Aires (CNBA) para exigir la inmediata reincorporación de los veintisiete docentes despedidos de esa Institución, quienes hasta el 31 de diciembre venían desempeñándose en sus tareas.
La resolución vulnera elementales derechos laborales como la estabilidad y el salario, y forma parte de una política de sistemático ataque que comenzó con la intervención del CNBA y cerró el año pasado con la imposición de un candidato a Rector que fue recusado por la mayoría de la comunidad docente, estudiantil, de graduados y padres del Colegio.
La AGD UBA advierte que, de mantenerse esta medida, está en serio riesgo el inicio de las actividades académicas en el Colegio.
Reproducimos a continuación la siguiente declaración de la Comisión Directiva de AGD Pellegrini, el Centro de Estudiantes y la Comisión Interna No docente.
NO A LOS DESPIDOS EN EL CNBA
La Comisión directiva de AGD PELLEGRINI, la conducción del CECAP y la Comisión Interna No Docente manifestamos nuestro más enérgico repudio a las medidas tomadas por las autoridades del CNBA el último 29 de diciembre. Dichas autoridades elegidas antidemocráticamente y funcionales a las politicas del Consejo Superior han despedido 27 trabajadores no renovándoles contratos y reasignando tareas y categorías a otros.
EXIGIMOS LA INMEDIATA REINCORPORACIÓN DE TODOS LOS DOCENTES ILEGAL E ILEGÍTIMAMENTE DESPEDIDOS.
ALERTAMOS A TODA LA COMUNIDAD SOBRE ESTA GRAVISIMA DECISIÓN QUE VUELVEN A IMPONER PRÁCTICAS AUTORITARIAS DE ÉPOCAS ANTERIORES.
REAFIRMAMOS NUESTRO COMPROMISO CON LA ESTABILIDAD LABORAL Y CARRERA DOCENTE DEMOCRÁTICAMENTE ACORDADA.
ADVERTIMOS QUE SI TODOS LOS DOCENTES NO SON RESTITUIDOS EN SUS CARGOS SE TOMARAN MEDIDAS DE ACCIÓN DIRECTA E IDÉNTICA RESPUESTA SE TENDRÁ FRENTE A CUALQUIER CASO EN QUE SE PRETENDA AVASALLAR LOS DERECHOS DE LOS TRABAJA DORES.
CONVOCAMOS A LA COMUNIDAD DE AMBAS ESCUELAS A MANIFESTARSE FRENTE A UN NUEVO E INACEPTABLE ATROPELLO.
Comisión Directiva AGD-Pellegrini, Comisión Interna No Docente Pellegrini, Conducción Centro de estudiantes del Pellegrini
PROCESAN A LOS LUCHADORES FERROVIARIOS
El juez federal de Quilmes, Luis Armella, resolvió el procesamiento de Omar Merino, Jorge Hospital, Eduardo Belliboni y Miguel Morales por “intimidación” al Ministerio de Trabajo y a la UGOFE”. El juez desarrolla la línea de la ‘seguridad democrática’ establecida por los intelectuales ‘progres’ del oficialismo, que consiste en aplicar el Código Penal a quienes actúan en el marco de una acción obrera de carácter colectivo para reclamar el cumplimiento de un compromiso oficial para con los tercerizados – pero sin la venia de la burocracia sindical. Las acciones similares bajo el patrocinio de la burocracia, quedan afuera de la ‘seguridad democrática’. El juez no ha tenido siquiera en cuenta el reiterado incumplimiento de esa resolución de integración al convenio de l! os tercerizados por parte de Tomada – que fue lo que motivó el corte de vías del pasado 23 de diciembre, en primer lugar. Incluso después del procesamiento, esos reclamos siguen absolutamente pendientes.
Este procesamiento se dicta cuando no hay la menor investigación sobre los desmanes ocurridos en la estación Constitución, que fueron promovidos por la burocracia de Pedraza para atacar el corte de vías de los tercerizados. Se ha llegado al extremo de que Ugofe, cómplice de la patota que asesinó a Mariano Ferreyra, en lugar de ocupar el banquillo de los acusados, aparece ahora como damnificada. Este ha sido el propósito del gobierno desde el 20 de octubre pasado: trasladar la responsabilidad por el crimen de Mariano Ferreyra a los amigos políticos de Mariano. El gobierno cierra su propio círculo para poder reafirmar su alianza económica y política con la burocracia sindical.
¿Se animarán los escribas K a decir que este procesamiento es ‘funcional’ a la supervivencia de los Pedraza?
No permitamos este atropello. Que paguen por el crimen de Mariano Ferreyra.
Este procesamiento se dicta cuando no hay la menor investigación sobre los desmanes ocurridos en la estación Constitución, que fueron promovidos por la burocracia de Pedraza para atacar el corte de vías de los tercerizados. Se ha llegado al extremo de que Ugofe, cómplice de la patota que asesinó a Mariano Ferreyra, en lugar de ocupar el banquillo de los acusados, aparece ahora como damnificada. Este ha sido el propósito del gobierno desde el 20 de octubre pasado: trasladar la responsabilidad por el crimen de Mariano Ferreyra a los amigos políticos de Mariano. El gobierno cierra su propio círculo para poder reafirmar su alianza económica y política con la burocracia sindical.
¿Se animarán los escribas K a decir que este procesamiento es ‘funcional’ a la supervivencia de los Pedraza?
No permitamos este atropello. Que paguen por el crimen de Mariano Ferreyra.
4 ene 2011
EL MINISTERIO DE TRABAJO NO CUMPLIÓ CON EL PASE A PLANTA DE LOS TERCERIZADOS FERROVIARIOS
Que el gobierno rompa con Pedraza
El compromiso oficial de que hoy se concretarían un millar de incorporaciones de tercerizados a la planta permanente del ferrocarril no se cumplió. Al dirigirse al Ministerio de Trabajo a tramitar sus altas tempranas a los puestos de trabajo, tal como había sido acordado, los representantes de los tercerizados recibieron como toda respuesta que “no había novedades” y que “se comunicarían con ellos” cuando las hubiera.
En el curso de la semana pasada, todos los voceros oficiales anunciaron con bombos y platillos el “pase a planta”, al tiempo que denunciaban a los tercerizados y a quienes los apoyaban por sus medidas de lucha “injustificadas”. La postergación sin fecha del pase a planta demuestra lo contrario: los tercerizados tenían toda la razón en salir a luchar. El pacto entre la patota ferroviaria de Pedraza y el gobierno sigue en pie.
Al frente de la Subsecretaría de Transporte Ferroviario continúa Antonio Luna, un agente de Pedraza. Los privatizadores Roggio, Cirigliano y Romero siguen gerenciando el ferrocarril, en sociedad con la burocracia sindical.
A quien quiera oírlos, los Pedraza y Maturano han señalado su oposición cerrada a que los tercerizados pasen a la planta. Quieren preservar el negocio de las tercerizaciones, así como su dictadura sobre los trabajadores del ferrocarril. En su extorsión, la burocracia también quiere tramitar su impunidad en relación al crimen de Mariano Ferreyra.
El Partido Obrero reclama que se cumplan los compromisos asumidos con los tercerizados ferroviarios, que volverán a movilizarse este miércoles 5 a las 18 horas por sus reivindicaciones.
Por el pase a planta de todos los tercerizados, por la equiparación salarial con el convenio ferroviario y la reincorporación de todos los despedidos.
Por la cárcel a Pedraza y a todos los cómplices e instigadores estatales, empresariales y policiales del crimen de Mariano Ferreyra.
Por la expulsión de la burocracia y los privatizadores del ferrocarril, y su renacionalización bajo gestión de representantes electos de los trabajadores.
El compromiso oficial de que hoy se concretarían un millar de incorporaciones de tercerizados a la planta permanente del ferrocarril no se cumplió. Al dirigirse al Ministerio de Trabajo a tramitar sus altas tempranas a los puestos de trabajo, tal como había sido acordado, los representantes de los tercerizados recibieron como toda respuesta que “no había novedades” y que “se comunicarían con ellos” cuando las hubiera.
En el curso de la semana pasada, todos los voceros oficiales anunciaron con bombos y platillos el “pase a planta”, al tiempo que denunciaban a los tercerizados y a quienes los apoyaban por sus medidas de lucha “injustificadas”. La postergación sin fecha del pase a planta demuestra lo contrario: los tercerizados tenían toda la razón en salir a luchar. El pacto entre la patota ferroviaria de Pedraza y el gobierno sigue en pie.
Al frente de la Subsecretaría de Transporte Ferroviario continúa Antonio Luna, un agente de Pedraza. Los privatizadores Roggio, Cirigliano y Romero siguen gerenciando el ferrocarril, en sociedad con la burocracia sindical.
A quien quiera oírlos, los Pedraza y Maturano han señalado su oposición cerrada a que los tercerizados pasen a la planta. Quieren preservar el negocio de las tercerizaciones, así como su dictadura sobre los trabajadores del ferrocarril. En su extorsión, la burocracia también quiere tramitar su impunidad en relación al crimen de Mariano Ferreyra.
El Partido Obrero reclama que se cumplan los compromisos asumidos con los tercerizados ferroviarios, que volverán a movilizarse este miércoles 5 a las 18 horas por sus reivindicaciones.
Por el pase a planta de todos los tercerizados, por la equiparación salarial con el convenio ferroviario y la reincorporación de todos los despedidos.
Por la cárcel a Pedraza y a todos los cómplices e instigadores estatales, empresariales y policiales del crimen de Mariano Ferreyra.
Por la expulsión de la burocracia y los privatizadores del ferrocarril, y su renacionalización bajo gestión de representantes electos de los trabajadores.
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