Con el asunto Scioli, banalizando un tema tan caro a las luchas de las mujeres como es la legalización del aborto; poniendo sobre la mesa el clásico doble discurso sobre este tema y otros (vidas privadas y públicas); la utilización de la imagen de mujeres exponiendo sus cuerpos y sus sexualidades con todo tipo de estereotipos, debe ponernos a pensar y a actuar a quienes queremos un proyecto nacional y popular que logre gobernar nuevamente por justicia y libertad que así no se enfrenta al neoliberalismo. Solamente lo enfrentamos construyendo organizaciones y referentes que tengan la capacidad de profundizar las transformaciones que nosotrxs mismxs hemos construido a lo largo de muchos años de resistencias y de conquistas.
Desear esto no es renunciar a construir mayorías.
Desear representaciones que tengan mucho más que ver con nuestra propia historia cotidiana no es renunciar a prepararnos para gobernar. Es solo hacer todo para que quienes buscamos las transformaciones profundas y duraderas seamos cada vez más fuertes.
Por suerte la política es otra cosa y la vivimos con nuestros cuerpos más allá de las "primicias" mediáticas...
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
Entradas
No hay comentarios.:
Publicar un comentario