Precios, salarios e incendio.
¿QUIENES PIERDEN Y QUIENES GANAN?
Devaluación e Inflación
Como todos sabemos la devaluación implica la pérdida nominal de la moneda nacional (Peso) en referencia a la moneda extranjera (Dólar); y la inflación la pérdida del poder adquisitivo de nuestro salario ante el avance desmedido de los precios, lo cual conlleva que mas argentinos no podamos cubrir las canasta de productos y servicios básicos.
Es decir que tanto la devaluación como la inflación es la transferencia de dinero de los sectores populares a los sectores oligárquicos.
Por lo tanto la batalla a librar está echada. Y se define en la calle construyendo organización, empoderando a los trabajadores y a los sectores populares, tras un programa de medidas políticas y económicas que le ponga el pecho y se lleve por delante al bloque oligárquico, construyendo un bloque social revolucionario que defina la disputa a favor de los intereses del pueblo y de la grandeza de la patria.
Entendiendo que la contradicción principal es Capital vs Trabajo.
Nosotros o ellos
Por lo tanto, si hay devaluación y alza de precios, los perdedores somos nosotros: los trabajadores, los jubilados, los sin trabajo, las medianas y pequeñas empresas, las empresas recuperadas, las familias agropecuarias, los campesinos, el pequeño y mediano productor, los comerciantes, etc.
Y los que ganan – con devaluación e inflación - son ellos: la oligarquía, los enrolados en la Mesa de Enlace de Grandes Empresarios del Campo, los bancos, los exportadores, los sojeros, las cadenas de supermercado, las corporaciones monopólicas y oligopólicas, y la estructura de partidos liberales, etc.
Está claro que el propio anuncio de la Presidenta (de estos últimos días), apreciable en cuanto a su intención de ampliar derechos, es devorado al mismo tiempo por los hechos que impone una realidad moldeada –desde la dictadura del 76- por el poder económico.
En la Argentina de estas horas, la ampliación de derechos como la inclusión social no debe estar separada del acceso real a los bienes que conforman una calidad de vida digna.
El Gobierno Nacional señala con claridad quienes son los sectores dominantes que pretenden imponer una argentina para pocos, una coyuntura devaluatoria y de constante suba de los precios.
Ahora bien, su respuesta práctica no se condice con lo señalado. Par dar batalla en la situación actual no alcanza con el intento de dinamizar simplemente el mercado interno (Cuidar Precios / Progresar / Aumento de Jubilaciones y Pensiones) y señalar al bloque oligárquico.
Es absolutamente necesario tomar medidas contundentes para que el puñado de oligopolios deje de tener el control de las divisas, y en definitiva deje de manejar la economía.
Es necesario también dar un paso atrás en el instrumento legal del fisco “contado con liqui”, el cual permitió la posibilidad de fugar 15.000 millones de dólares de la Argentina.
Y hacer una reflexión crítica del pago de 43.000 millones de dólares de una deuda externa fraudulenta.
Los golpes de 1955 y 1976 tuvieron como objetivo destruir a la clase trabajadora, desindustrializar y achicar el mercado interno; para moldear una argentina en beneficio de la oligarquía ganadera y agraria. Al igual que la hiperinflación de fines de los `80 y la era vendepatria-menemista.
Es por eso que vemos con enorme inquietud las últimas medidas, pues no es renegociando con el Club de París, ni buscando tomar nueva deuda en el extranjero, y mucho menos achicando los ingresos populares como se fortalecerá el campo popular para torcerle el brazo al enemigo histórico de nuestro pueblo.
Nuestra Propuesta
Por lo expresado nos comprometemos desde una concepción revolucionaria, es decir honesta, transformadora y desde, con y para el pueblo, a llevar adelante un plan político para dar batalla popular a la devaluación y la inflación, para construir una vida que merezca ser vivida con dignidad. Por lo tanto planteamos:
En el plano estructural:
1) Que el Poder Ejecutivo Nacional impulse con la fuerza necesaria en la UNASUR la construcción del Banco del Sur, que tenga como objetivo apostar a la producción y no a la especulación.
2) Por Control Estatal del Comercio Exterior, (IAPI del Siglo XXI)
3) Por una nueva ley de Entidades Financieras.
4) Por la Nacionalización de los Puertos Privados.
5) Por no más pago de Deuda Externa fraudulenta.
6) Por la renuncia al CIADI.
En el Plano de lo Inmediato
7) Paritaria Social para los trabajadores informales, las cooperativas de trabajo, etc.
8) Por un Mercado Central Sociedad del Estado que opere en todo el territorio nacional, con ferias o/y almacenes populares.
9) Por la devolución del IVA – de la canasta de productos y servicios básicos - a los beneficiarios que cobran con tarjetas (Jubilados, Pensionados, AUH, Argentina Trabaja, Progresa, Pensiones) y para todas y todos los trabajadores que perciban menos de 7.200 $.
10) Por el Control Popular de los precios y de todas las cadenas de producción. Con una capacidad de corrección inmediata con la participación de todas y todos los sectores populares del quehacer nacional.
Hacia dónde vamos
Nuestra búsqueda es la participación democrática y plural de nuestro pueblo. Para debatir y decidir desde las bases qué tipo de Constitución y de Estado necesitamos como pueblo, para enfrentar el poder de las corporaciones.
Es decir que pretendemos edificar una democracia del pueblo y no una democracia que termine favoreciendo a los grupos económicos. Porque los grandes grupos económicos, sin que nadie los vote, saquean nuestra patria a diario y se manejan siniestramente en su vida institucional.
Sino miremos el incendio del depósito de barracas IRM (Iron Mountain), una de las empresas más grandes del mundo de almacenamiento y manejo de documentación, la cual tiene como antecedente el incendio de 5 depósitos declarados intencionales a nivel mundial. Cabe preguntarnos: ¿Qué documentación se habrá perdido en el incendio que dejó la trágica muerte de 9 argentinos?; ¿De la Shell, del HSBC, de las empresas oligopólicas que se llenan de riqueza ajena?; ¿La justicia Argentina actuará sobre los responsables de las muertes y la pérdida de valiosa documentación, cayendo sobre ellos con todo el peso de la Ley?
Es por que sostenemos que “Solo el Pueblo, organizado, salvara al Pueblo”, y que por lo tanto debemos ponerle el cuerpo diariamente a la construcción de organismos populares, en cada barrio, en cada fabrica, en cada casa de estudio, que impulse y difunda nuestra propuesta de programa, que organice a nuestras mujeres y a nuestros hombres, a nuestros jóvenes y a nuestros adultos, para dar la batalla del pueblo, contra las grandes corporaciones y por una democracia a favor de los trabajadores y del pueblo todo.
Nosotros estamos convencidos que no queremos, ni vamos a permitir volver a los ’90, a la época del ajuste y de la entrega infame.
Utilizaremos todas las formas de lucha necesarias contra las corporaciones, iremos a sus sedes, las bloquearemos, iremos a la casa de sus CEO. Si ellos pisotean nuestra patria y no nos dejan vivir con dignidad, nosotros los iremos a buscar.
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