4 ago 2009

MIERCOLES 5/8 – 11 HS - ACTO EN EL HOSPITAL DE SAN ISIDRO

EXIGEN LA RESTITUCIÓN DEL SERVICIO DE MEDICINA PREVENTIVA Y SOCIAL AL HOSPITAL Y QUE DEJEN DE APLICAR EL PROTOCOLO ILEGAL CONTRA LA GRIPE PORCINA

Los profesionales de la salud del Hospital Central de San Isidro “Dr. Melchor Ángel Posse”, junto con los pacientes del Servicio de Medicina Preventiva y Social del centro realizarán un acto este miércoles a las 11 de la mañana en la entrada del hospital, ubicado en la Avenida Santa Fe 431.

Además de reclamar que detengan la aplicación del protocolo ilegal para tratar la gripe porcina que afectó a más de 150 pacientes( correcto)que presentaron síntomas adversos por su aplicación, exigirán que el Servicio de Medicina Preventiva y Social que fuera trasladado al Centro de Atención Primaria “F. J. Muñiz” sea restituido al edificio central del hospital. La Federación Sindical de Profesionales de la Salud de la República Argentina (FESPROSA) y la Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la Provincia de Buenos Aires (Cicop) ya habían denunciado que el servicio fue desplazado como represalia por el cuestionamiento de los profesionales de la salud a la aplicación de un protocolo que denuncian como ilegal.

Respecto a la denuncia del desplazamiento del Servicio de Medicina Preventiva y Social desde el edificio del hospital al Centro de Atención Primaria “F. J. Muñiz”, Jorge Yabkowski, titular de FESPROSA señaló que se trata de un servicio que atiende en su mayoría a pacientes infectados por el virus VIH1 desde 1987 con amplia experiencia y conformado por profesionales reconocidos.

“Los pacientes que se encuentran internados en el servicio no son de atención primaria, requieren una atención integral con capacidad para hacer laboratorio de urgencia y radiografías en el lugar, con posibilidad de interconsultas en el momento, con necesidad de internaciones. Además en el caso de no haber farmacéutico no se pueden expender los medicamentos y los pacientes tienen que hacer un viaje adicional al Hospital”, señaló Yabkowski.

Los propios pacientes del área, enviaron una carta al intendente Gustavo Posse denunciando que al llegar al servicio el 8 de julio, sin que nadie les informara nada al respecto, se enteraron tras recorrer distintas áreas del hospital de la medida de traslado. “Cuando las autoridades se defienden alegando que esta es una “medida preventiva para protegernos -de la influenza A- por nuestra deficiencia inmune”, ¿toman en cuenta que de todas formas debemos ir a la farmacia del Hospital a retirar la medicación, que si estamos muy enfermos deberemos ser trasladados en ambulancia, que si tenemos necesidad del servicio de rayos, laboratorio o especialistas de todas formas deberemos concurrir a dicho establecimiento? En los casos de internación, ¿quién controlará nuestro proceso si los profesionales que nos conocen sólo atienden en el CEDEPREN y no hacen más el seguimiento en piso ya que no pueden ir al Hospital?”, cuestionan los pacientes en su carta.

“Es evidente por todas estas razones que con esta medida no nos están protegiendo sino que nos sentimos perjudicados y discriminados. No queremos pensar que la pandemia de la gripe porcina fue utilizada políticamente para “sacarse de encima a un grupo de trabajo excepcional” pero que probablemente cuestione ciertas decisiones que se tomaron en el Hospital y que salieron a la luz en la revista Noticias del 18/07/09 donde se denunció el uso de un tratamiento experimental con Tamiflú a los casos de gripe A. Se suministraba una dosis más alta que la recomendada por la OMS mientras en otras provincias había argentinos que no tenían acceso al medicamento”, señalan antes de reclamar la restitución del servicio al propio hospital.

Por otra parte, a pesar de la denuncia que los profesionales de la Salud presentaron a los ministros de Salud de Nación y Provincia de Buenos Aires, Juan Manzur y Claudio Zin respectivamente, en el Hospital Central de San Isidro siguen aplicando el protocolo ilegal para tratar la Gripe Porcina. La FESPROSA y Cicop informaron que ya son más de 150 los pacientes tratados con el protocolo que denunciaron como ilegal y muchos de ellos ya están presentando síntomas adversos por su aplicación. “No podemos entender cómo, a pesar de las denuncias presentadas en el Ministerio y la intervención del Defensor del Pueblo, siguen impunemente aplicando un experimento que no está autorizado por ninguno de los organismos correspondientes. Esto es verdaderamente una falta total de responsabilidad y jugar con la salud de los más vulnerables”, señaló Jorge Yabkowski, titular de la Federación.

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