Al cumplirse 9 meses de la masacre de la Estación Once, declaró en el juicio por el asesinato de Mariano Ferreyra el ex-secretario de transporte Juan Pablo Schiavi. En su exposición se excusó de dar detalles por los manejos económicos de la Secretaría que tenía a cargo, entre los que cuentan los subsidios a las concesionarias ferroviarias, alegando que al estar procesado en la causa de Once cualquier precisión sobre el tema podría perjudicarlo
Gabriel Solano, dirigente del PO presente en el juicio, señaló que "la negativa de Schiavi a informar sobre el manejo económico de la Secretaría de Transporte muestra que la trama de negocios que llevó al asesinato de Mariano Ferreyra es la misma que determinó el accidente de Once. La concesionaria UGOFE, que aún hoy sigue a cargo del ferrocarril Roca, estaba integrada al momento del asesinato de Mariano Ferreyra por la empresa TBA de Cirigliano. Tanto en el Roca como en el Sarmiento los subsidios millonarios se entregaban sin control y alcanzaban, también, a las tercerizadas manejadas por la burocracia sindical de Pedraza. La Secretaría de Transporte no velaba ni por la seguridad del servicio ni por las condiciones en la que los trabajadores eran contratados por las empresas".
"Schiavi, que en su testimonio hizo una profesión de fe kirchnerista, debió declarar como imputado y no como testigo” –afirmó Gabriel Solano. “Esto prueba que además de los imputados que están siendo sometidos a juicio queda por avanzar sobre las responsabilidades empresariales, y la de los funcionarios de la Secretaría de Transporte y de aquellos que tenían el mando político de la Policía Federal que liberó la zona para la actuación de la patota criminal que asesinó a Mariano Ferreyra”.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario