14 abr 2016

YA SALIO NO TRANSAR N° 106

Ya salió no transar 106
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Editorial
A pesar del ajuste, la entrega y la corrupción
El gobierno pisó el acelerador y lo que se insinuó como gradualismo se transformó en ajuste ortodoxo a secas. Luego que devaluó y liberó precios y tarifas, buscó absorber el circulante monetario pagando tasas exorbitantes, contener los salarios y reducir el empleo para que, por efectos de una caída en el consumo o demanda compradora, los precios a partir de junio, en el mejor de los casos, comiencen a estacionarse y bajen los índices inflacionarios. El gobierno decidió salir de la crisis según el manual de la ortodoxia capitalista, trasladando los costos del ajuste al campo popular. El viejo argumento sobre la herencia recibida y la necesidad de aplicar medidas dolorosas porque no hay otra alternativa surge siempre después de cada elección. Frente a una economía que ya venía planchada y sin crecimiento industrial, acentuar la recesión y secar la plaza de billetes requiere necesariamente del ingreso de capitales extranjeros que den sustento al funcionamiento del capitalismo monopólico. Eso sí, será en condiciones de mayor sometimiento externo, de mayor vulnerabilidad en el manejo de los recursos naturales, de regresión salarial y empobrecimiento. Aun así, nada tienen asegurado. Según el informe último de FIEL, se necesitarían U$S 32.000 millones en principio para equilibrar y recién después todo nuevo ingreso podría tener un sentido productivo en la economía. Dicha cifra incluye los bonos a emitir para cumplir con los holdouts, las remesas de dividendos de las multinacionales, pagos de deudas pendientes  de las provincias y de sectores privados. El informe sostiene que, en lo que va del año, solo había ingresado el 10% de aquella impactante suma.
Macri sigue exprimiendo los efectos del viaje del presidente norteamericano, tanto como el éxito político obtenido con el acuerdo parlamentario para cancelar la deuda con los fondos usureros y salir del default. Ambos hechos sirvieron como cobertura política para profundizar los tarifazos de abril y la inflación, aunque sus resultados, destacados como “históricos” en los medios, se diluyen rápidamente ante el crecimiento de la disconformidad y la movilización popular.

Quitas salariales y despidos, propios de cualquier recesión, no crean las mejores condiciones para la lucha de los trabajadores. Si a esto le agregamos el hándicap favorable pos electoral de un gobierno con apenas 100 días en el poder, el resultado parece cantado. Sin embargo, la realidad y los números marcan otra cosa.

Según el Centro de Estudios Nueva Mayoría, durante enero de 2016, tuvieron lugar 44 conflictos laborales. La cifra contrasta claramente con los 23, 16, 31 y 12 conflictos registrados en igual mes durante 2012, 2013, 2014 y 2015, respectivamente. Los despidos en la administración  pública han sido la causa principal de este incremento.
La ola de cesantías en la administración pública se diferencia claramente de la observada durante la denominada Reforma del Estado (véase privatizaciones) del gobierno menemista, durante la cual el ajuste incluyó el pago de despidos, retiros voluntarios e indemnizaciones, fenómeno que no se verifica en la actualidad, dando cuenta de la precariedad del empleo público asociada a la existencia de contratos basura de la etapa anterior y a la inconstitucionalidad de los despidos. Es decir, se trata de cesantías doblemente ilegales.


La visita de Obama
Muy por debajo de la euforia oficialista y mediática desatada por la visita del presidente de los EEUU a la Argentina, los resultados concretos en términos de inversiones directas que deja el paso de Obama por el país, son mucho más etéreos que la expectativa instalada por el macrismo respecto de una “lluvia de dólares” que acompañaría al mandatario yanqui. Donde sí hay avances inquietantes es en materia de acuerdos de cooperación relativos a terrorismo, seguridad, defensa e inteligencia. En este terreno, a pesar de la escasa información divulgada, hay motivos para prever una mayor injerencia en la política interior y exterior.
El anuncio de U$S 2.300 millones de inversiones para los próximos 18 meses no se acercan ni remotamente a lo esperado para remontar la cuesta en que se encuentra la economía nacional.


Macri obtuvo el respaldo para acordar con los buitres
El intento regulador del capital financiero tuvo su consecuencia lógica: Sin mayores contratiempos el gobierno logró un apoyo al acuerdo con los fondos buitres por parte de propios y ajenos.

En el marco de un intento de resurgimiento mediático, el ex Secretario de Comercio, Guillermo Moreno, no ha dudado en afirmar que Cristina Fernández no tuvo el poder durante su gestión. Que el poder estuvo y está en manos de los grandes grupos económicos. Y que, respecto del gobierno anterior, Héctor Magnetto (expresión del poder real), precedió, permaneció y persistió al mismo.
Dicha afirmación, sin embargo, no puede eludir la aporía del “Estado en disputa” que el propio kirchnerismo formuló en su mejor momento, cuando pretendía que su gobierno había puesto en jaque al poder de los Magnetto´s desde un “espacio” “nacional y popular”, contando para ello no sólo con votos, sino, además, con capacidad de movilización de masas, justificación de la intelectualidad orgánica, subordinación de un sector de las Fuerzas Armadas, crecimiento chino del PBI, viento de cola en la balanza comercial, holgura de las reservas en el Banco Central, etc., razón por la cual bien cabría preguntar: ¿si eso no fue disposición de poder, qué fue?


1965 - 5 de abril - 2016
El pasado 5 de abril nuestro Partido cumplió 51 años de su fundación en 1965. En este marco se realizó en la Facultad de Cs. Sociales de la UBA en la Capital Federal una charla debate bajo los ejes “El macrismo: su perspectiva regional. La lucha de los trabajadores para derrotar el ajuste. Nuestro proyecto: sin revolución los pueblos no tienen salida”. A continuación compartimos un fragmento de las palabras dirigidas por Andrés Zamponi de la Dirección Nacional del PRML. 

A 40 años del golpe genocida
Alrededor de 300.000 personas se movilizaron en todo el país en el 40° aniversario del golpe del 76´. La masividad de la jornada aportó varios elementos para tener en cuenta.

En primer lugar, se destaca la mayor concurrencia que en los años anteriores. Esto no solo reafirma la solidez de la conciencia antigolpista de nuestro pueblo, sino que es rotunda señal para los sectores más reaccionarios, con el diario La Nación a la cabeza, de que la conciliación con los los crímenes del terrorismo de estado no es negociable.
A nadie le pasó por el costado que este 24 también fue una contundente manifestación de repudio a las medidas que viene llevando adelante el gobierno. A diferencia de las movilizaciones de los años del kirchnerismo, este fue un punto de contacto de las diferentes convocatorias. Así, junto al repudio al golpe y la reivindicación de los 30.000 detenidos-desaparecidos, estuvieron presentes el rechazo a las medidas de ajuste. Le agregó un ingrediente importante la presencia de Obama en nuestro país, que le sumó, con el repudio a la visita, un fuerte contenido antiimperialista a la movilización.

En todo el país
El 4 de abril se realizó el paro nacional docente, impulsado por la CEA (moyanista) y la CTERA (CTA yasquista), que culminó en la CABA con un acto que concentró alrededor de 13.000 compañeros. El apoyo a las luchas salariales en curso en varias provincias, y la impunidad en la causa por el asesinato de Fuentealba fueron la base de la convocatoria.

Estatales
El macrismo avanza en su plan de despidos masivos en el Estado, bajo el eufemismo de la “no renovación de contratos”, herencia de precariedad laboral del gobierno anterior.

En la administración nacional, están ahora en conflicto la Biblioteca Nacional y los Ministerios de Trabajo y Economía. En ambas carteras la respuesta de los trabajadores fue más rápida de reflejos que durante la ofensiva gubernamental de principio de año, lo que da cuenta de que la acumulación desde diciembre del año pasado, con su pico el 24/02, va haciendo visibles sus efectos.


Acosada por las disputas internas, la corrupción y la crisis económica
Una crisis política de enormes proporciones se  desarrolla en Brasil. La investigación judicial conocida como “Lava Jato”, está dejando al descubierto una telaraña de corrupción multimillonaria que involucra a personajes de la primera plana empresarial y política del país.

La investigación, que empezó hace dos años ya acumula más de noventa condenados y es considerado el escándalo de corrupción más grande de la historia de Brasil.

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