Las 400.000 almas que entonaron el himno a las 0 horas del 25 de mayo, entre el bombo guevarista de los Olimareños y el dulce bombo de la Sole - el de su hijo por nacer - son el eje central de los festejos: La 9 de Julio desbordada como no se veía desde el `83… Allá por los actos de cierre de las primeras elecciones tras la dictadura, que convocaron hasta la semana santa del `88, al protagonismo masivo.
Este de la 9 de julio desbordada fue el momento crucial, que marca el “clima de época” de la celebración, por lo masivo de la misma y por el hecho indiscutido de que la Revolución de Mayo fue, inicialmente, un hecho “porteño”. Y su celebración… ¡También!...
Sin embargo, en esa multitud que fue la síntesis extendida del encuentro de distintas vertientes, solo cupieron 3 identidades políticas:
1 - Las banderas visibles de un ignoto “Movimiento Peronista”! Ignoto como organización con banderas propias – aunque como fenómeno socio político no ha dejado aún de ser el eje del acontecer político argentino desde el ya lejano ´55… (A diferencia del PJ, que no puede más que refugiarse en algún Intendente del “baronazgo” duhaldista del conurbano, o en algún Gobernador claudicante ante las mineras, que hacen fanfarrias y fuegos artificiales, pero no existen nacionalmente…).
2 - Algo que no se vio en la tele, pero que no dejó de llamar la atención de los cientos de miles de paseantes: Las mesas de Sabbatella, tratando de recoger en la multitud las 40.000 fichas que la flamante ley de Partidos (aprobada traicioneramente por el PJ y el radicalismo) le obliga a tener con urgencia, para existir como fuerza política… Más allá de su reconocido peso ideológico en la coyuntura…
Contradictorio: Tener que estar salvándose de los golpes de los propios aliados en medio de la fiesta, como Martín… O, como el propio oficialismo, debiendo ahora eludir el que intentó Pepe Mujica (que de tonto no tiene un pelo) y apareció por la reapertura de la reinauguración del Colón, convertida en eje de la “contra”… (¿Estará apostando un huevito a la canasta de una derecha capaz de destrabar a la indómita Gualeguaychú a palos?)
3 - Y Las banderas de “la Fede”, también visibles, y poniéndole la cuota de sal, de movimiento progresivo, a un “movimiento” peronista que, pese a su nombre, siempre ha pretendido ser conducido hacia “la paz” – hacia “el equilibrio”. Quizás porque sus dirigentes, a pesar de promover la Siambreta, nunca leyeron enserio a Marx… Y no lograron teorizar correctamente eso que arriba de una motito – o cualquier otra cosa móvil, incluida la historia - se sabe instintivamente: Que, el equilibrio solo existe en movimiento…
Ese tema del equilibrio en movimiento, como única forma de equilibrio de lo vivo, debería incorporarse al análisis político diario.
Un ejemplo vivo y actual es el balance del segundo fenómeno político popular más resonante de estos días: Se avanzó con la marcha de los Pueblos Originarios a que estos se hagan visibles. Pero el que como todo logro les hayan formado una comisión (a lo Perón: “Para que sobre eso no se haga nada”…), deja viva la Plaza del Congreso, con la "otra Marcha", tratando de analizar en dos jornadas de reflexión, junto a parte de la izquierda, como seguir adelante…
Y no reaccionar desde la creencia de que lo alcanzado es insuperable, como hacen desde el kirchnerismo “puro”, tratando a quienes empujan el proceso hacia adelante de “enemigos”…
Pensar el actual proceso sin Solanas, sin el Perro Santillán y su gente, sin Sabbatella y sin la Fede… Deja al kirchnerismo reducido al PJ… Es decir: A un cascajo viejo y oxidado que no se ha cansado de darse vuelta tras el ganador de turno… Se llame este Ménem, Duhalde o Kirchner… Donde la última vez que lo hizo fue durante la lucha por la 125, donde, como todos sabemos, fue para atrás… (Aunque entre ellos se engañen recordando solo a Cobos, en la agachada traidora).
Soledad donde se terminarían entregando frente al desprestigiado Macri. Aunque este hoy aparezca herido en sus fundamentos, obligado a reponer en su puesto a los cientos de despedidos del Colón, para poder reabrirlo a tiempo y así achicar en algo (ante los pocos que ayer miraban canal 13, al menos) los efectos desastrosos, de su condición de procesado por asociación ilícita, por organizar una banda para espiar a los ciudadanos… O el “aparato” de Duhalde / De Narváez, en las “internas abiertas”…
Son entonces para pensar desde esa perspectiva, las figuras elegidas para la “Galería de los Patriotas”, donde van a coexistir quietitos los cuadros de heroicos caudillos nacionalistas como Rosas, Yrigoyen, Perón o Arbenz, con fogosos revolucionarios, como Tupac Amaru, Artigas, Sandino, Evita y el Che…
Difícil equilibrio ese, si se lo piensa afuera de los quietos cuadros… Con el Evo, Chávez y Correa, arriba de los escenarios de los festejos de hoy… Al lado, por ejemplo, de un Piñera…
Son para pensar también desde esta perspectiva “dialéctica”, las medidas pendientes para continuar avanzando, cuyo temario actualizaron ¡muy bien! los Pueblos Originarios, al reclamar sus tierras, pero también queriendo avanzar sobre las petroleras, las mineras a cielo abierto y la extensión indiscriminada de la siembra de soja… Junto a las medidas más “light” (aunque no menos urgentes), como son: la ley de servicios bancarios, la de despenalización del aborto o la del casamiento gay…
Este verdadero programa de transformaciones fue lo que votó la mayoría de la Capital y las fuerzas emergentes en Buenos Aires, San Juan y otras Provincias…
Y si no queremos caernos de la bicicleta de la historia, marcada por el “clima de época” de este bicentenario de la Patria… Deberemos recordar que lo esencial para ello, es que permanentemente hay que seguir avanzando…
Y por lo tanto, deberán ser:
El temario del futuro…
Finalmente me despido diciéndoles aquello que canta Silvio: "Con la necedad de asumir al enemigo...Con la necedad de vivir sin tener precio..."
Este de la 9 de julio desbordada fue el momento crucial, que marca el “clima de época” de la celebración, por lo masivo de la misma y por el hecho indiscutido de que la Revolución de Mayo fue, inicialmente, un hecho “porteño”. Y su celebración… ¡También!...
Sin embargo, en esa multitud que fue la síntesis extendida del encuentro de distintas vertientes, solo cupieron 3 identidades políticas:
1 - Las banderas visibles de un ignoto “Movimiento Peronista”! Ignoto como organización con banderas propias – aunque como fenómeno socio político no ha dejado aún de ser el eje del acontecer político argentino desde el ya lejano ´55… (A diferencia del PJ, que no puede más que refugiarse en algún Intendente del “baronazgo” duhaldista del conurbano, o en algún Gobernador claudicante ante las mineras, que hacen fanfarrias y fuegos artificiales, pero no existen nacionalmente…).
2 - Algo que no se vio en la tele, pero que no dejó de llamar la atención de los cientos de miles de paseantes: Las mesas de Sabbatella, tratando de recoger en la multitud las 40.000 fichas que la flamante ley de Partidos (aprobada traicioneramente por el PJ y el radicalismo) le obliga a tener con urgencia, para existir como fuerza política… Más allá de su reconocido peso ideológico en la coyuntura…
Contradictorio: Tener que estar salvándose de los golpes de los propios aliados en medio de la fiesta, como Martín… O, como el propio oficialismo, debiendo ahora eludir el que intentó Pepe Mujica (que de tonto no tiene un pelo) y apareció por la reapertura de la reinauguración del Colón, convertida en eje de la “contra”… (¿Estará apostando un huevito a la canasta de una derecha capaz de destrabar a la indómita Gualeguaychú a palos?)
3 - Y Las banderas de “la Fede”, también visibles, y poniéndole la cuota de sal, de movimiento progresivo, a un “movimiento” peronista que, pese a su nombre, siempre ha pretendido ser conducido hacia “la paz” – hacia “el equilibrio”. Quizás porque sus dirigentes, a pesar de promover la Siambreta, nunca leyeron enserio a Marx… Y no lograron teorizar correctamente eso que arriba de una motito – o cualquier otra cosa móvil, incluida la historia - se sabe instintivamente: Que, el equilibrio solo existe en movimiento…
Ese tema del equilibrio en movimiento, como única forma de equilibrio de lo vivo, debería incorporarse al análisis político diario.
Un ejemplo vivo y actual es el balance del segundo fenómeno político popular más resonante de estos días: Se avanzó con la marcha de los Pueblos Originarios a que estos se hagan visibles. Pero el que como todo logro les hayan formado una comisión (a lo Perón: “Para que sobre eso no se haga nada”…), deja viva la Plaza del Congreso, con la "otra Marcha", tratando de analizar en dos jornadas de reflexión, junto a parte de la izquierda, como seguir adelante…
Y no reaccionar desde la creencia de que lo alcanzado es insuperable, como hacen desde el kirchnerismo “puro”, tratando a quienes empujan el proceso hacia adelante de “enemigos”…
Pensar el actual proceso sin Solanas, sin el Perro Santillán y su gente, sin Sabbatella y sin la Fede… Deja al kirchnerismo reducido al PJ… Es decir: A un cascajo viejo y oxidado que no se ha cansado de darse vuelta tras el ganador de turno… Se llame este Ménem, Duhalde o Kirchner… Donde la última vez que lo hizo fue durante la lucha por la 125, donde, como todos sabemos, fue para atrás… (Aunque entre ellos se engañen recordando solo a Cobos, en la agachada traidora).
Soledad donde se terminarían entregando frente al desprestigiado Macri. Aunque este hoy aparezca herido en sus fundamentos, obligado a reponer en su puesto a los cientos de despedidos del Colón, para poder reabrirlo a tiempo y así achicar en algo (ante los pocos que ayer miraban canal 13, al menos) los efectos desastrosos, de su condición de procesado por asociación ilícita, por organizar una banda para espiar a los ciudadanos… O el “aparato” de Duhalde / De Narváez, en las “internas abiertas”…
Son entonces para pensar desde esa perspectiva, las figuras elegidas para la “Galería de los Patriotas”, donde van a coexistir quietitos los cuadros de heroicos caudillos nacionalistas como Rosas, Yrigoyen, Perón o Arbenz, con fogosos revolucionarios, como Tupac Amaru, Artigas, Sandino, Evita y el Che…
Difícil equilibrio ese, si se lo piensa afuera de los quietos cuadros… Con el Evo, Chávez y Correa, arriba de los escenarios de los festejos de hoy… Al lado, por ejemplo, de un Piñera…
Son para pensar también desde esta perspectiva “dialéctica”, las medidas pendientes para continuar avanzando, cuyo temario actualizaron ¡muy bien! los Pueblos Originarios, al reclamar sus tierras, pero también queriendo avanzar sobre las petroleras, las mineras a cielo abierto y la extensión indiscriminada de la siembra de soja… Junto a las medidas más “light” (aunque no menos urgentes), como son: la ley de servicios bancarios, la de despenalización del aborto o la del casamiento gay…
Este verdadero programa de transformaciones fue lo que votó la mayoría de la Capital y las fuerzas emergentes en Buenos Aires, San Juan y otras Provincias…
Y si no queremos caernos de la bicicleta de la historia, marcada por el “clima de época” de este bicentenario de la Patria… Deberemos recordar que lo esencial para ello, es que permanentemente hay que seguir avanzando…
Y por lo tanto, deberán ser:
El temario del futuro…
Finalmente me despido diciéndoles aquello que canta Silvio: "Con la necedad de asumir al enemigo...Con la necedad de vivir sin tener precio..."
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