Morir en Arroyito bajo el fuego financiado con petrodólares.
Arroyito despoblado, afuera de la ciudad neuquina, cruzado por autopistas que desplazan turistas, manzanas, gas, petróleo y mercenarios del movimiento neuquino.
Territorio del país que se viene; el zaguan del sur con oro negro, gas, mineras; lavadero de operaciones trascontinentales.
Comarca de traficantes de mujeres, automóviles y destilado de droga.
Estado mafia que administra la riqueza provincial.
Cien por ciento preparado para disciplinar y quitar lo molesto.
La dictadura pudo cambiar su piel y ahora se desliza por la prospera provincia, vigila y mata, como el perro guardián que cuida su presa.
Al maestro Carlos Fuentealba, una mañana como esta, seis meses atrás, lo asesinan por entender contra qué luchaba.
Jorge Julio López esta desaparecido por lo mismo.
Los presos políticos de esta democracia flagelada.
El Estado burgués en transición crítica y con libertad condicionada.
Los Pactos Sociales de corporaciones vigilantes.
La cultura envoltorio para los gritos silenciados del pueblo, aplanado por existencialismos baratos de rápida descomposición.
La educación con certificado de garantías a la obediencia infinita de los vencidos.
La Iglesia que llora en silencio al cura torturador Von Vernich.
A Fuentealba lo mataron por el país que algunos sueñan y otros presienten.
Por ser distinto a los burócratas que hoy se movilizan en su nombre.
Por tener un sueño en la patria liberal progresista.
El titular de la Comisión de Derechos Humanos del parlamento nacional, Remo Carlotto recibió un petitorio para que la sagrada institución republicana haga algo.
Caerá en saco roto porque este Congreso está lleno de entregadores.
La justicia expresada en miles de marchantes honestos debe girar con otro enfoque.
La bronca impulsada requiere objetivo; representaciones legítimas y unidad que articulo algo más que discursos.
Lo mejor de la burocracia progresista es marchar para peticionar.
O amenazar con paro para negociar.
Y después desmovilizar.
Es la construcción de la impotencia que mantiene impune a empresarios y gobiernos corruptos que violan derechos y garantías.
La batalla por los derechos humanos no puede quedarse en el museo de la Esma. Discutir quienes viven y mal mueren en nuestro país es una causa del mayor derecho humano. Debate y acción sin tregua por la igualdad frente a tanta riqueza.
Los juicios contra los genocidas deben continuar junto con el juicio y castigo a los genocidas de la democracia neoliberal sostenida por corporaciones políticas, empresarias. Sindicales y eclesiásticas.
Carlos Fuentealba sabía eso, y emprendió la batalla cultural como docente, marchó con su gremio asumiendo su derecho pleno. Como Teresa Rodríguez, Victor Choque, Kostequi, Santillán y otros hermanos, es un crimen político y los hombres que gobiernan ese sistema de matanza siguen impunes; siempre regresan a la política y discurseando por la tele con su aptitud cien por ciento, impunes.
Qué moral se puede mostrar con orgullo frente a una desigualdad que abruma con solo caminar por las calles.
Lo mismo de siempre.
Menem sigue vivo.
Sobisch encima pretende ser presidente.
Duhalde regresa.
Barrionuevo sigue.
Alfonsín habla.
La izquierda honesta y militante se banca los egoísmos de sus dioses y la unidad no madura.
Los represores se dan el lujo de secuestrar, amenazar y desaparecer a testigos y ahora a jóvenes militantes secundarios.
Las empresas cerraron, abren tres sobre miles de cadáveres y hacemos fiesta. Los empresarios son cada vez más ricos. Aplaudimos la industria cartonera y las normas de higiene para las familias que cargan basura en lugar de porvenir.
Nos fuimos al carajo, hermano. Seguimos viajando en el gallinero donde hay cacareo y pocos huevos.
Poca diferencia entre los sindicalistas empresarios que ahora lloran por Fuentealba y los egoísmos de muchos compas incapaces de discutir una unidad de sacrificios, de clase, de actualidad frente al poder disgregador del enemigo.
Ante tanta derrota es fácil competir en la nada y acusar al otro inválido políticamente, mientras al poder que tritura ideas, legitimidades, principios y riqueza, nada. Van a sus canales que los entrevisten los del City Bank.
Salute, Fuentealba.
Diste una lección y deberemos seguir aprendiendo.
Omar López AM 570 radio Argentina de lunes a viernes de 11 a 12 hs
Revista bimensual Mate amargo
www.mateamargo.org/agencia
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