GACETA ROJA / Septiembre de
2012
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ELECCIONES EN LA UBA
Declaración de PRISMA/Estrella Roja frente a las elecciones en la
UBA
La
izquierda frente al kirchnerismo
En este último tiempo se evidenciaron síntomas de crisis en la
economía argentina. Es el mismo gobierno nacional quien ha reconocido en los
últimos discursos oficiales que la misma “ya no está blindada”. Y la aplicación
de la política anunciada y titulada a fines de 2011 como “sintonía fina” no es
menos de lo esperable de un gobierno que representa y defiende los intereses de
la clase dominante: ajuste nacional como política de estado. La quita progresiva
de subsidios a los servicios públicos y la consiguiente liberación de tarifas,
el aumento en el transporte público, el tope a las paritarias (con su fuerte
aliado, la burocracia sindical) y la bendición de los gobiernos provinciales a
los despidos y suspensiones acompañadas de represión (el Ingenio Tabacal en
Salta). La otra cara del discurso oficial, por el contrario, habla de
desarrollismo, industrialización, opone capitales extranjeros a capitales
“nacionales”, oligarquía terrateniente a burguesía industrial y pide
colaboración entre el sector trabajador y el sector empresarial (omitiendo que
esos sectores son clases sociales antagónicas) Lejos de un proceso de
industrialización, el “modelo” kirchnerista se sostiene sobre una estructura
económica primarizada. La profundización del modelo es la profundización de esta
matriz económica, que al mismo tiempo implica tercerización y precarización
laboral (el 35% de los trabajadores se encuentran en negro).
El
plano político y social
Si antes hablábamos de recomposición política y normalización del PJ,
hoy comienzan a manifestarse fisuras dentro de la clase dominante. La nueva
ruptura de la CGT y el alejamiento del sindicato de camioneros, son elementos
importantes para analizar la situación del régimen político. De todos modos,
pese a la sonoridad inicial del embate moyanista, la fisura se mantiene como
escisión sindical dentro de la CGT y fricciones políticas al interior del PJ,
pero sin desarrollarse de forma turbulenta y sin afectar, hasta el momento, el
consenso y la legitimidad del gobierno nacional. Sin embargo, el quietismo del
sector moyanista que siguió a la movilización del 27 no debe hacernos olvidar
que se trata del sector que ha hegemonizado la política sindical como columna
vertebral del kirchnerismo durante casi una década y como tal sigue siendo una
fuerza política de peso en el escenario nacional, con la potencialidad de
incidir en el mismo en distintas direcciones.
Criminalización, represión y protesta
social
En las últimas semanas, se sucedieron dos hechos que ponen de relieve
nuevos elementos a la hora de discutir y enfrentar la represión de la protesta
social. Por un lado la policía provincial del gobernador kirchnerista Urtubey,
desalojó un corte de ruta y reprimió a los trabajadores del Ingenio San Martín
del Tabacal (pertenece a la empresa norteamericana Seabord Corporation, la
segunda en nivel de producción después de Ledesma). La medida de fuerza contenía
el principal reclamo de un aumento salarial en el marco de las negociaciones
paritarias. Luego de la combinatoria de una conciliación obligatoria y el
despido de 57 trabajadores, 300 policías, con una orden judicial, desalojan un
corte de ruta con gases lacrimógenos y balas de goma. Inmediatamente, un
comunicado oficial advertía que sólo se buscaba “evitar daños irreparables para la salud y la
seguridad de la población" profundizando de esta manera la fragmentación de la
clase obrera. Por otro lado, el jueves 30 de agosto en un enorme operativo de la
gendarmería dirigido por el secretario de seguridad Sergio Berni (funcionario
del kirchnerismo desde la década de los ’90), se reprimió brutalmente a
militantes de movimientos sociales de la CCC, el Polo Obrero y Barrios de Pie
que pedían aumento salarial de los precarizados planes Argentina Trabaja y el
pago de sueldos adeudados. El nivel de represión va en aumento y el
kirchnerismo esta vez no salió a mostrar su “ala progresista”: “el Gobierno no
puede permitir esa manera irracional de cortar la Panamericana durante una hora
y media y dejar a miles y miles de argentinos varados en la ruta, con necesidad
de ir a trabajar, al médico o sus tareas habituales"[1]; por el contrario, ratificó lo
ocurrido y responsabilizó a la clase trabajadora acusándola de utilizar como
escudo a mujeres y niños.
Ante esta política de ajuste y profundización de las instituciones
represivas, se expresa cada vez más clara la contracara del discurso de los
Derechos Humanos y la falsa dicotomía que el kirchnerismo proponía el año
pasado: ajuste en Europa y un “modelo” de desarrollo con inclusión social y de
redistribución de la riqueza.
Por una
izquierda fuerte en la UBA
Desde PRISMA sostenemos que el rol de la izquierda no sólo consiste
en organizar al movimiento estudiantil entorno a sus reivindicaciones gremiales,
sino también en enfrentar y disputar ideológicamente el discurso hegemónico, hoy
encabezado por el kirchnerismo. Es por eso que consideramos que un centro
superador es aquel que sea expresión de la unidad de la izquierda, expresión de
debates políticos que se traducen en acciones concretas dentro de la facultad y
fuera de ella. Un movimiento estudiantil que levante la bandera de Mariano
Ferreyra, la bandera de la juventud militante que lucha por ver materializadas
las reivindicaciones históricas pendientes y futuras en unidad con la clase
trabajadora.
En el escenario de la UBA se vuelve necesario disputar la
caracterización y el lugar otorgado a la “juventud”. Hace dos años tanto el
gobierno nacional como los diversos medios han resaltado el renacimiento de una
“nueva juventud militante” enfiladas tras el oficialismo. Este fenómeno está
íntimamente ligado a la política sin historia que promueve el
kirchnerismo y que muchos retoman, incluso desde posiciones “de izquierda”.
La juventud militante precede al gobierno, además de incluso oponérsele.
Ésta es la que destina su práctica cotidiana a una militancia crítica de su
realidad, que entiende que esa misma realidad no se puede separar en aspectos
“buenos” y “malos”, en donde los últimos serían simples “anomalías”. Así como
pasó con los diversos posicionamientos en el marco de la compra forzada de
acciones a Repsol (que hoy celebra convenios con trasnacionales de diversa
índole) o la ley de medios (que muchas agrupaciones fueron a celebrarla al
congreso y hoy las supuestas ventajas legalistas están guardadas en un cajón).
Para romper con los esquemas conservadores y desmovilizadores que
imperan hoy en las conducciones de los centros de estudiantes de la UBA
(Sociales, Filosofía y Letras) que lejos están de retomar luchas históricas,
apropiárselas y construirlas, la
izquierda combativa debe intervenir en estas elecciones, con el principal
objetivo de enfrentar al kirchnerismo sin ambigüedades y con fuertes
definiciones políticas en función de poder construir un centro de estudiantes
que sea una herramienta que permita ubicar al movimiento estudiantil nuevamente
como un actor protagónico. En este sentido, la orientación política que
propugnan la Juventud Rebelde y sus grupos satélites no nos permite organizarnos
para luchar, y luchar para ganar: algo mínimo para cualquier construcción
político-gremial que se pretenda “de izquierda”. Y ni siquiera es
necesario mencionar en este aspecto la multiplicidad de vicios burocráticos, las
componendas con las gestiones o la convivencia pacífica con la militancia
oficialista (La Cámpora y grupos similares)
En un marco de crisis, ajuste y fisuras en el bloque dominante se
abre una mayor perspectiva para el desarrollo de la izquierda a nivel general.
No obstante, dicho desarrollo no se desenvuelve linealmente. Es menester
entender la tarea que se nos presenta por delante: no sólo concebir a los
centros de estudiantes como herramientas gremiales, sino también como potentes
herramientas políticas. Herramientas políticas que desde la organización y el
análisis concreto de la realidad, impulsen y orienten de conjunto la lucha de
los estudiantes garantizando la independencia política para enfrentar al
kirchnerismo. Por eso, llamamos a las distintas agrupaciones de izquierda de
todas las facultades a que se sumen a conformar nuevos frentes, en el caso de
Piscología y fortalecer los construidos, en caso de Sociales y Filo. La oportunidad de disputar al
kirchnerismo y a sus adaptaciones y resignificar a la militancia juvenil en
clave revolucionaria, transformadora y crítica y, finalmente, que la izquierda
vuelva a ocupar el lugar estratégico en el movimiento estudiantil, son los
motivos que nos convocan a reforzar las experiencias políticas de 2011.
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PSICO/UBA
De qué hablamos cuando hablamos de la unidad de la izquierda
Para
PRISMA, un centro superador es aquel que sea expresión de la unidad de la
izquierda, expresión de debates políticos que se traducen en acciones concretas
dentro de la facultad y por fuera de ella. Un centro que no sea solo reflejo de
su conducción si no que, conteniendo y potenciando las distintas iniciativas,
impulse a todos los estudiantes a ser parte de su construcción cotidiana, con
especial preponderancia por los espacios asamblearios y de base, que tienda a
levantar de conjunto y poner de pie al movimiento estudiantil de Psicología. Un
movimiento estudiantil que levante la bandera de Mariano Ferreyra, la bandera de
la juventud militante que lucha por ver materializadas las reivindicaciones
históricas que nos mueven hacia adelante y en unidad con la clase
trabajadora.
Y
qué paso...
Lo
que el año pasado empezaba a recorrer la facultad como rumor, el martes se
materializó –finalmente- en la ruptura del frente EPA! Sin mucho pudor, y
relegando a un segundo plano las argumentaciones políticas, las agrupaciones El
Brote y MotorPsico llevaron a los cursos (como quien dice “llueve”) su
nueva “alianza” –más allá del principio de la negación-, plasmada en un
consignismo que dice bastante poco. “Un centro de los estudiantes o los
estudiantes al centro”. Omitiendo de esta manera convocar a los estudiantes
a fortalecer y desarrollar el plan de lucha votado en asamblea la semana
anterior. En este sentido, el punto de partida que proponen El Brote y
MotorPsico nos parece un retroceso en sí mismo ¿Qué refundación, qué
novedad, qué nueva gremialidad estudiantil pueden apostar a construir si su
primer movida es anteponer unaprecipitada
campaña electoral al desarrollo de un plan de lucha mandatado por la asamblea
del CEP?
Llegamos
con fuerzas disgregadas el día martes, a una asamblea poco participativa no solo
por su escasa convocatoria sino por la dinámica que tomaron las discusiones,
donde las fuerzas de izquierda tuvimos la iniciativa de generar debate político
mientras organizaciones desorientadoras celebraban rupturas de frentes ajenos,
sembrando el desconcierto en un clima de profundo cinismo. Y así llegamos al
jueves 13, cuando se está desarrollando un paro docente nacional para frenar las
cesantías, que en el marco de ajuste del gobierno nacional, el rector Hallú
implementa...y los compañeros muy ocupados en su electoralismo.
No
es tanto si se rompe o no un frente, si no los argumentos políticos que se
esgrimen alrededor. ¿Un centro que no tiene posicionamientos políticos concretos
a la hora de analizar la coyuntura nacional, que contiene ambigüedades y
confunde quién es el que está enfrente? Una nueva gremialidad estudiantil -y que
además se pretenda “de izquierda”- no puede girar en el vacío y la
autoconstrucción. No se puede omitir y mirar para otro lado cuando nuestra
Facultad se encuentra atravesada transversalmente por conflictos no menores como
el del Borda, las cesantías a nuestros docentes, los problemas edilicios y
académicos, que son básicamente problemas políticos con responsables concretos:
la decana Cervone y sus grupos afines, en una larga alianza entre los radicales
y el kirchnerismo.
Para
esto es necesario no tener ambigüedades a la hora de identificar a los enemigos
de la educación y la salud públicas, sea que vistan de amarillo (Macri) o de
celeste y blanco (el kirchnerismo) En suma, entendemos que partimos de un piso
de organización y una historia de lucha que es necesario mantener y prolongar:
flaco favor le hacemos a la organización estudiantil en torno al CEP si
anteponemos la autorreferencialidad y el electoralismo. Los desafíos que tenemos
por delante no son pocos, y tenemos que estar a la altura: la unidad de los que
luchan es una condición necesaria para avanzar por encima de los cimientos que
once años del EPA! han dejado como saldo organizativo. Está en juego la
siguiente dicotomía: un CEP de lucha que rescate lo positivo de la organización
estudiantil lograda hasta ahora y lo desarrolle en una perspectiva acorde a los
tiempos que corren; o un CEP centrado en su conducción, productor y reproductor
de un discurso tan ganchero como “despolitizado”, ahistórico y aislado
de las múltiples luchas que tenemos que encarar.
Convocamos
a los estudiantes a participar esta semana de:
Martes
18 al mediodía al Comedorazo en la sede Independencia (Comisión por la
Emergencia edilicia)
Miércoles
19 a las 18hs sede Independencia Comisión Antirrepresiva por Justicia por
Mariano Ferreyra
Jueves
20 a las 18hs Asamblea General de Psicología (CEP) Balance de las acciones y
continuidad del plan de lucha
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SOCIALES/UBA
TRABAJO
SOCIAL
Como
ya todos sabemos, la carrera de Trabajo Social está atravesando desde principios
de año el fin de la reforma de su plan de estudios. ¿Qué significa esto? Que
previo al cierre del primer cuatrimestre la gestión de la carrera (Agrupación
Lucía Cullen) decidió que ya se había tratado la reforma de nuestro plan durante
un tiempo considerable, por lo cual ya era hora de pasar a votación. Siendo
consecuentes con sus metodologías antidemocráticas, intentaron votar la reforma
del plan de estudios durante el receso invernal, con aulas vacías y sin
comunicar al estudiantado sus intenciones.
De
esta forma llegamos a un Consejo Directivo en el cual, los estudiantes nos
manifestamos en contra de la política reformista de la Cullen, impidiendo que se
pase a votación.
Es
por esto que llamamos a todos los estudiantes y docentes a sumar sus ideas y sus
cuerpos a esta lucha. Es imperioso que todos los compañeros de 5 carreras de
Sociales se sumen a la lucha que venimos dando ya que, como bien sabemos, en
este momento también se está intentando reformular el plan de estudios de la
carrera de Comunicación y la avanzada k continúa...
Debemos
comprender que las reformas de los planes de estudio son tan solo un aspecto de
la sintonía fina que el kirchnerismo está llevando adelante en nuestra
Universidad. Estamos sufriendo un profundo ajuste a la educación pública. Están
cesanteando a nuestros docentes, desmantelando cátedras, cerrando concursos y
grupos de investigación y, uno se pregunta ¿podemos mantenernos ajenos a esto?
Claro que no, desde PRISMA venimos militando y luchando codo a codo con los
compañeros docentes desde principio de año para frenar las cesantías, para
impedir la reforma del plan de estudio de Trabajo Social participando en
instancias de base como el Espacio Abierto de Trabajo Social. Este panorama de
ajuste a la educación se traduce en el panorama laboral con despidos masivos,
tercerizaciones, represiones a los compañeros manifestantes que luchan, topes a
las paritarias, y la lista sigue.
Como
futuros trabajadores sociales no podemos ni debemos permitir semejante atropello
a la educación, como así tampoco podemos pasar por alto los ajustes a los
trabajadores. Nuestra intención es construir un profesional crítico,
consecuente, autónomo y al servicio de la clase trabajadora. Queremos decidir
qué tipo de Trabajo Social queremos construir, no vamos a permitir que nos
formen para luego actuar como tapa baches del gobierno.
Ante
un nuevo Consejo Directivo en el cual debemos redoblar el esfuerzo y salir a
lucha, demostrándole a aquellos que gobiernan nuestra facultad que los
estudiantes no vamos a permitir semejante atropello a nuestra formación. Ahí
estaremos una vez más los estudiantes, agrupados y no agrupados, docentes y
compañeros de otras carreras que no queremos ser formados como agentes
tecnócratas alineados al servicio y en beneficio del gobierno de
turno.
Y
vamos a estar ahí todas las veces que sea necesario hasta lograr dar vuelta la
página, porque el movimiento estudiantil nunca se conformó con migajas, y esta
no va a ser la excepción.
Seguimos
luchando.
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Agrupacion
PRISMA / Estrella ROJA
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20 sept 2012
POSICIONAMIENTO FRENTE A LAS ELECCIONES EN LA UBA
Posicionamiento frente a las elecciones en la UBA
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