Desde temprano, el viernes 21 una marea roja fue cubriendo los alrededores de la cancha de All Boys. Iban llegando las delegaciones y columnas de distintas provincias y localidades, y entre abrazos de camaradas de los destacamentos obreros, campesinos, originarios, de mujeres, estudiantes, profesionales, desocupados, jubilados, se iba preparando el gran acto del PCR. Mientras las delegaciones eran atendidas por las compañeras y compañeros de la Capital Federal, sonaban los bombos y se ponían a punto las batucadas. Pasado el mediodía, todos los accesos a la cancha desbordaban de gente y entusiasmo con la llegada de las grandes columnas de algunas provincias, del conurbano y la Ciudad de Buenos Aires, con las calles cortadas alrededor de All Boys.
Este extraordinario acto, y la presencia de los miles y miles que lo protagonizaron, fue la culminación de un intenso trabajo político y organizativo. Partimos de la convicción de que la celebración de estos 50 años, reafirmando el camino iniciado el 6 de enero de 1968, tenía que estar a la altura, y nos pusimos en marcha. Así miles en todo el país juntaron peso sobre peso para los micros y la comida de los que viajaron cientos de kilómetros, y desde la dirección del Partido y la Juventud se garantizó cada detalle de la organización, la seguridad, el financiamiento y la propaganda, antes, durante y después del acto, movilizando a cientos de camaradas.
 All Boys a pleno
Cuando se abrieron los accesos, el río rojo, con los carteles identificando sus lugares, los rostros de nuestros mártires, y las flameadoras del Partido y la Juventud, las de Mao y el Che, fue cubriendo los lugares asignados. Las banderas argentinas, y los carteles de la Corriente Clasista y Combativa se entremezclaban en esta marea clasista, mostrando la alegría y la organización de las y los protagonistas de decenas de combates populares en todo el país.
A las 17.30, cuando los locutores dieron la bienvenida a la multitud, miles de banderas rojas flameaban en la cancha de All Boys, y se cubrían por completo las tribunas y el campo, con el agite de la juventud, y con el empuje de las distintas generaciones de militantes. El acto fue una verdadera fiesta, en la que dejamos claro que el comunismo sigue vivo y creciendo en nuestra patria con las banderas del marxismo-leninismo-maoísmo. Cerramos así un año de grandes luchas obreras y populares contra la política de Macri, un año en el que avanzamos en ampliar la unidad social y política, antiimperialista, para derrotarlo en las calles y electoralmente.
Fue vibrante la apertura del acto, con el himno nacional y la recordación de nuestros mártires y de los compañeros dirigentes fallecidos en estos años. La emoción creció con el saludo del secretario general de nuestro Partido, Otto Vargas, quien no pudo asistir por razones de salud. “Otto corazón, acá tenés los pibes para la revolución”, tronó la juventud.
Al palco subieron camaradas de la JCR y del Partido dirigentes de distintos procesos, así como una delegación del Comité Central del PCR. Durante el acto se leyeron parte de las numerosas adhesiones y se destacaron las presencias de dirigentes de múltiples organizaciones, entre ellas las del PCR del Uruguay con su secretario general Ricardo Cohen y una delegación del Partido Paraguay Pyahurá.
  “Más temprano que tarde, vamos a triunfar
El primer orador fue el camarada Rodolfo Schwartz secretario del PCR del Chaco; quien reseñó los últimos combates que tuvieron como protagonistas al Partido y la Juventud, “en una provincia agraria como la nuestra”, particularizando en la reciente y exitosa marcha “El Chaco dice Basta”. Cerró su intervención planteando “Hemos hecho grandes luchas en estos 50 años, pero para estar a la altura de las circunstancias es necesario crecer de a saltos. Debemos abrir las puertas del PCR y la JCR a las compañeras y compañeros probados en este camino… Necesitamos decenas de miles para dirigir millones… La influencia y respeto ganado en tantos años, debemos transformarla en fuerza partidaria organizada”.
Luego, Carolina Antognini, integrante de la dirección del Partido de la regional La Plata y delegada gremial del cuerpo de delegados del Astillero Río Santiago, comenzó recordando que en el ARS, que está cumpliendo 65 años, nuestro partido también cumple 50 años de actividad ininterrumpida. Carolina destacó algunos hitos en la lucha de este destacamento de vanguardia del proletariado, remarcando el protagonismo de las trabajadoras. “Esta es la única fábrica que en los 90 no pudieron privatizar, y que hoy a pesar de los intentos de Macri y Vidal no pudieron dinamitar. Traigo un mensaje de las y los trabajadores: con la lucha y la más amplia unidad se le puede parar la mano y derrotar la política de Macri”, afirmó.
Mercedes “Memé” Meier, diputada provincial por el PTP de Santa Fe en el Frente Social y Popular, se refirió en primer término a la extraordinaria lucha del movimiento de mujeres en la Argentina, destacando que “Estamos acá las comunistas revolucionarias poniendo en discusión todo lo que debe ser cambiado. Somos parte del gigantesco movimiento de mujeres de la Argentina que no va a pedir permiso para hacer temblar las bases mismas del sistema patriarcal, oligárquico imperialista que domina nuestras vidas. Y por eso acá no hay lugar para el escepticismo, porque estamos rebeladas, miles de pibas ganamos las calles ¡y no nos callamos más!” Memé destacó también la importancia del trabajo legislativo, para llevar al seno de una de las instituciones del Estado las luchas de las calles, y las propuestas y demandas populares.
El agite creció cuando fue presentado el secretario de la Juventud Comunista Revolucionaria, Luciano Álvarez. Luciano reivindicó a las distintas generaciones de militantes del Partido, y remarcó que “no estamos de acuerdo con las teorías que dicen que ser joven es ser un valor en sí mismo”, sin negar la rebeldía de la mayoría de la juventud. Ejemplificó con la “marea verde” de las mujeres la potencia de la integración de las jóvenes con las mayores. Trazó Álvarez un recorrido del protagonismo juvenil en los combates populares, denunciando los estragos que hace la política macrista: “No queremos la Argentina del hambre, el gatillo fácil y la droga que es hoy la Argentina de Macri. En la que no hay ninguna perspectiva de futuro para la juventud, donde hay 6.255.000 chicos que fueron empujados a la pobreza y a la desesperación por esta política. Queremos cambiar todo lo que tenga que ser cambiado. Eso somos, y estamos convencidos que más temprano que tarde, vamos a triunfar”.

“La revolución, una tarea pendiente”
Llegó el turno de la camarada Rosa Nassif, del Comité Central del PCR, quien manifestó la emoción “para los que fundamos este Partido, encontrarnos con los miles de jóvenes que levantan las banderas por las que surgimos hace 50 años, en la pelea por la revolución que es una tarea pendiente”. Se refirió Nassif a la necesidad de “explorar los gigantescos cambios que se produjeron en el mundo para, con la guía de la teoría viva que es el marxismo-leninismo-maoísmo, descubrir las nuevas formas y contenidos que nos permitan lograr nuestro objetivo revolucionario”. Señaló luego que el socialismo fue derrotado y que “aun nos falta profundizar en las causas de esas derrotas y en los errores que cometimos… como hicieron los marxistas luego de la derrota de la Comuna de París para sacar lecciones y hacerlo mejor”. Nassif se refirió también a que “los millones que luchan se preguntan si hay una salida popular para la crisis o si será más de lo mismo. Este es el debate político que debemos dar de cara a las elecciones”. Y concluyó que es necesario discutir el programa concreto sin el cual no hay futuro para nuestro país, “esto es lo que estamos discutiendo con los amigos peronistas y otras fuerzas políticas con las que queremos construir un frente electoral para derrotar a Macri y avanzar en un camino liberador”.
Una nueva ovación acompañó la presentación del camarada Juan Carlos Alderete, miembro del Comité Central de nuestro Partido, secretario del zonal de La Matanza, y coordinador nacional del Movimiento de Desocupados y Precarizados de la CCC. Alderete agradeció la presencia de muchos amigos con los que venimos compartiendo las luchas contra este gobierno, en particular “a quienes ahora también son mis amigos”, los dirigentes de la CTEP y Barrios de Pie. Alderete afirmó: “Nuestro partido nació en la época en la que todos queríamos ser como el Che Guevara. Cuando los jóvenes soñábamos con el socialismo y creíamos que la revolución estaba a la vuelta de la esquina. Desde entonces, cambiaron muchas cosas en Argentina y en el mundo. Pero las lacras del sistema capitalista crecieron, desde que en 1989, los imperialistas festejaron el fin de la historia, la muerte del comunismo, el triunfo del capitalismo y la globalización, crecieron la desigualdad, el hambre, las guerras, la precarización laboral y miles huyen desesperados de sus países buscando un refugio donde poder vivir. Para resolver los problemas de nuestro pueblo hay que romper con el FMI y la deuda y tenemos que proyectar en la más amplia unidad la fuerza política que abra la posibilidad de un mejor futuro para todas y todos”.

“Hay que destruir este Estado para construir uno donde los trabajadores, los campesinos y el pueblo puedan tener la sartén por el mango”
Cerrando la lista de oradores, habló Jacinto Roldán, por el Comité Central del PCR. Comenzó destacando algunos hitos de estos 50 años, “porque en este acto hay muchos que vienen por primera vez a un acto, y preguntan quiénes somos”. Afirmó “Es difícil resumir la historia del partido en un discurso. Somos los que hace 50 años rompimos con el PC cuando entendimos que por su línea revisionista y su traición al Che se había transformado en una traba para la revolución… Nacimos encabezando las luchas contra la dictadura de Onganía… dijimos que había un polvorín reseco bajo los pies de la dictadura de Onganía y trabajamos para que el polvorín estalle. Y el polvorín estalló… Encabezando las luchas fuimos ajustando la línea y el programa, y en ese recorrido desembarcamos en las playas del maoísmo, eso nos permitió tomar al marxismo-leninismo-maoísmo como base teórica del Partido”.
“Somos un Partido que se forjó y aprendió de las grandes luchas del SMATA Córdoba en los 70, de la huelga larga del Swift de Berisso en 1979, de la histórica toma de Ford. De las luchas de Terrabusi, de Siderca. Y somos parte de ese contingente de obreros del Astillero Río Santiago, que enfrentó la privatización en los noventa y ahora viene enfrentando la política de Macri y Vidal. También somos motor en las luchas de los originarios y de los campesinos pobres que han forjado la Federación Nacional Campesina. Con el ejemplo de los compañeros caídos como Mártires López. Somos los que frente al hambre y la desocupación ayudamos a organizar a los desocupados y los precarizados en la gloriosa Corriente Clasista y Combativa que es un ejemplo de organización para lucha que nos llena de orgullo.
 “En 1996 lanzamos la consigna ‘por un Argentinazo que imponga otra política y otro gobierno’.  Y en el 2001, con la revuelta popular del 19 y 20 de diciembre por primera vez en nuestra historia una pueblada nacional volteó un gobierno, pero la clase obrera y el pueblo no coronaron. ¿Y quiénes somos? Somos el Partido de Otto Vargas, eso somos, compañeros.
“Macri hundió este año en la pobreza a más de dos millones de argentinos.  Con esta política nada es a favor del trabajo y la producción nacional. Salvo lo que hemos conquistado con la lucha… Nosotros no queremos un frente político solo para las elecciones. Con las elecciones y con la lucha en las calles pugnaremos por ampliar y fortalecer este frente político en un sentido revolucionario. Y necesitamos que nuestro Partido pegue un salto en el crecimiento para afirmar ese camino…Somos conscientes que hay que destruir este Estado para construir uno donde los trabajadores, los campesinos y el pueblo puedan tener la sartén por el mango. Y resolver el pan, el techo, la salud y la educación para nuestro pueblo” dijo Roldán.

Cerramos así este extraordinario acto, con las banderas desplegadas, como hace 50 años. Cantando las vibrantes estrofas de La Internacional, el himno de los trabajadores del mundo entero, reafirmamos nuestro compromiso de mantenernos en el camino de la lucha por la revolución en la Argentina, para dar vuelta el viento a favor del pueblo.