DESPIDOS Y PERSECUCIONES PATRONALES EN LA ZONA NORTE

Los empresarios de la Zona Norte del gran Bs. As comenzaron un ataque
a los trabajadores. La mayoría son filiales multinacionales. Para muestra de esto, vale resaltar que el martes último la empresa Pabsa fue militarizada por la Policía Bonaerense. Buscan instalar el miedo y allanar el camino del recorte de costos con la excusa de la crisis global.

En la empresa Dana se despidieron a 15 trabajadores efectivos, algunos de los cuales se habían presentado a elecciones de delegados, fueron proscriptos y luego votados por los trabajadores más allá de la convocatoria del sindicato. Las suspensiones son masivas. En Pabsa (autopartista) se despidieron a todos los contratados y luego ilegalmente a más de 20 efectivos aduciendo un preventivo de crisis que nunca fue homologado y sin otorgar la lista de los despidos.

Los trabajadores no contaban con delegados electos sino con “voceros” puestos a dedo por el gremio del Plástico, por lo que votaron en asamblea a sus representantes. Uno de ellos fue suspendido a los dos días de la votación como parte de una persecución alevosa. Un trabajador como forma de protesta subió al techo de la fábrica por lo cual fue demorado por 7 horas por la policía bonaerense y luego llevado a un manicomio sin orden judicial en un caso sin precedentes.

En la fabrica Lear se despidieron también trabajadores efectivos. En Terrabusi (Kraft) se despidieron a los contratados, se presionó para conseguir despidos “voluntarios” de efectivos que pasaron los 40 y se amenaza con un plan de 300 despidos que busca atemorizar a los trabajadores para que no reclamen lo suyo.

Por su parte avanzan juicios de desafuero sobre delegados de Fate y toda la Seccional San Fernando del S.U.T.N.A (Trabajadores del Neumático) mientras al coordinador de la Interna de Terrabusi Ramón Bogado se lo lleva a juicio penal por un corte de ruta. Los despidos se realizan conscientemente por un sistema de "goteo" y muchos caen sobre quienes alzaron la voz generando así temor y parálisis entre los trabajadores.

FUENTE: AGENCIA WALSH