MPR-QUEBRACHO: TREN BALA UN PROYECTO PARA POCOS, UNA BURLA AL PUEBLO

“Un salto a la modernidad” fueron las palabras de Cristina Kirchner para definir el nuevo proyecto de Tren Bala, que en el mediodía de hoy fue adjudicado al consorcio liderado por la empresa francesa Alstom.Este “gran salto” para Cristina, significará un crecimiento en la deuda externa argentina de US$ 3.900 millones. Desde este punto de vista, más que un salto a la modernidad pareciera ser un salto al vacío, o mejor, un paso más en el camino de la dependencia económica de nuestro país con los organismos de crédito internacional.El tan promocionado tren bala es en realidad un proyecto para unos pocos, que genera más gastos, que endeuda a nuestro país y que es una burla para todos los usuarios de los trenes de la ciudad que padecemos diariamente transportes públicos en condiciones deplorables.La glamorosa señora Cristina comparó este proyecto con las maravillas del Proyecto de construcción de Puerto Madero, ¡como si los argentinos ya nos hubiéramos olvidado que éste se construyó desde la apropiación privada de los terrenos públicos del Puerto! El metro cubierto vale u$s 4000. ¿Cuántos argentinos tenemos acceso a disfrutar del magnánimo Puerto Madero?De la misma forma ahora nos quieren convencer de que el tren bala será una obra que nos incluirá a todos los argentinos en el siglo XXI ¿Quiénes disfrutarán de ese servicio si por esas cosas logran construirlo y ponerlo en marcha?, ¿quienes pagarán la tecnología que se necesitará para mantener en funcionamiento esos trenes que no la tenemos en este país? Nos embarcan en este mega proyecto, en vez de trabajar en pos de una reestructuración de los ferrocarriles como los interurbanos que unían las provincias, cuya liquidación en la década anterior aisló pueblos, reventando las economías de los pequeños productores dependientes de este transporte y provocando las migraciones de compatriotas a las ciudades capitales por ver sus medios de vida destruidos. Ahora resulta que el tren bala tiene prioridad por sobre la reconstrucción de la industria ferroviaria pública que podría generar miles de puestos de trabajo, mejorando las vías de los ramales a las provincias, comprando locomotoras y vagones en buenas condiciones hechos en talleres argentinos y no la chatarra ferroviaria cara y sin repuesto que compra en Portugal o España el secretario de Transporte Ricardo Jaime.Tampoco se destinará el presupuesto necesario para que el servicio de trenes urbanos fuese más seguro y confortable, lejos de eso seguiremos viajando con formaciones de trenes destruidas, locomotoras reventadas de tanto uso y vagones en mal estado, hacinados en los vagones en los horarios picos, con servicios que nunca respetan los horarios asignados, llegando tarde a nuestros trabajos.Cuántos miles de millones seguirá regalando en subsidios el estado para que terminen en jugosas ganancias de empresarios BUITRES como Taselli, Cirigliano, Techint, Urquía, Camargo Correa, entre otros que se llevan ganancias por $ 350 millones al año. La ley de Reordenamiento ferroviario permitirá que esto siga igual, con los funcionarios cómplices que seguirán regalando subsidios a los mismos delincuentes de siempre.En un país pensado para pocos, donde pocos son los que disfrutan del crecimiento económico, pocos los que se llenan los bolsillos con la entrega de nuestros recursos, el gobierno quiere que pocos sean también los que puedan trasportarse dignamente.

NACIONALIZACIÓN DE LOS FERROCARRILES

POR UN TRANSPORTE PÚBLICO DE CALIDAD PARA TODOS