El gobierno de los "derechos humanos" mostró la hilacha nuevamente.
Después de reprimir a los trabajadores del INDEC hizo lo propio con quienes se manifestaban recordando el aniversario de la Masacre de Trelew y marchaban hacia la Casa de Santa Cruz.
Mientras Sobisch, la mayoría de los genocidas y asesinos del gatillo fácil continúan libres e impunes, las cárceles argentinas se siguen poblando de luchadores.
Más allá de las diferencias políticas con los compañeros apresados, los partidos de la izquierda y combativos debemos reclamar su inmediata libertad.
Basta de Represión KLibertad a los presos de Las Heras, a Lezcano, Esteche y demás luchadores encarcelados por la policía kirchnerista
Por el Comité Ejecutivo de Convergencia Socialista
Juan Giglio
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