24 ene 2008

¿DEBEREMOS TRAER LA LECHUGA DE CHINA?

Mientras las acciones de nuestros gobernantes apuntan a las grandes obras e inversiones, se olvidan de los pequeños productores que son los que realmente alimentan a nuestras comunidades.

El Centro de Protección a la Naturaleza advierte sobre la desaparición del Cinturón Hortícola Santafesino, uno de los más importantes del país por la variedad, calidad y cantidad de los productos cosechados. Las noticias periodísticas de los últimos días dan cuenta de la virtual desaparición de productores frutihortícolas debido a la falta de rentabilidad y anuncian que se volcarían a la producción de soja.

Todos estos alimentos, a pesar de algunos altibajos económicos, resultan baratos para los consumidores por estar a no más de 30 km. de los centros de consumo. Debemos recordar que los altos precios del tomate o de la papa hace poco tiempo no se debió sólo a factores climáticos sino también al traslado y disminución de los centros de producción ante la expansión de la frontera agropecuaria, especialmente por la soja.

Nuestro cinturón hortícola es uno de los pocos que sobreviven en la provincia, ya que la mayoría ha desaparecido de los pueblos del interior, a costa de cultivos extensivos más rentables. Esta desaparición, además de las causas económicas, se encuentra en franca contradicción con la aplicación concreta de la Ley Nª 11.273, la que establece marcar una línea agronómica para proteger a las poblaciones de las fumigaciones y favorecer las producciones cercanas de alimentos.

Bajo esta legislación, nuestros productores frutihortícolas tampoco podrían cultivar soja o maíz o girasol porque sus explotaciones se encuentran en zonas urbanas o dentro de la línea agronómica, donde no se debe fumigar . Por lo tanto, el cambio en el modo de producción será imposible de ser implementado, condenando a familias enteras a la miseria.
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Mientras el Ministerio de la Producción provincial pone énfasis en las "cadenas de valor", se pierde de vista la función vital del Estado que es la de compensar las asimetrías. Las acciones compensatorias deben tomarse ahora, apoyando y protegiendo los establecimientos ganaderos, tamberos y producciones frutihortícolas, que nos garantizan alimentos cercanos, económicos y de buena calidad.

Comisión Directiva del Centro de Protección a la Naturaleza
Santa Fe, 23/01/08

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