27 may 2008

LAS MADRES DE PLAZA DE MAYO JUNTO A LA LUCHA CAMPESINA

Buenos Aires, 27 de mayo de 2008

Las Madres participaron del Segundo Encuentro Nacional del Frente Nacional Campesino que se desarrolló en la Universidad Popular Madres de Plaza de Mayo, el pasado viernes 23 de mayo, en el que organizaciones campesinas de todos el país se hicieron presentes para “afianzar el Frente que hace visible la existencia de otro campesinado en todas las provincias de la República Argentina”.


Según, Roberto Mirabara, uno de los representantes de esa mesa de trabajo y de los producores familiares de la provincia de Buenos Aires, “es necesario tener injerencia en las políticas públicas del sector, que se estudie la tenencia de las tierras, los créditos blandos y el cuidado del medio ambiente”. Además, explicó, que se conformaron comisiones “para empezar a trabajar encuentros regionales y desembocar, el próximo 8 de septiembre, día de la agricultura, en un gran Congreso Nacional de campesinos de todo el país”.
Asimismo, el sábado 24 se realizó la Segunda Feria Provincial de Semillas Nativas y Criollas “Sembrando Esperanza”, donde las Madres fueron especialmente invitadas a participar del intercambio de semillas naturales que realizan los agricultores.
En ese evento participaron más de 150 organizaciones de todo el país, se dictaron talleres de conservación del medio ambiente y se habló de la Ley de Desarrollo Rural en la que, de acuerdo a Mirabara, “estamos trabajando junto con el ministerio de Desarrollo Social, se plantea una infraestructura colectiva, educación, caminos y energía eléctrica para que los campesinos sin recursos no tengan que migrar a las ciudades y se generen, así, cordones de pobreza”.
En esa feria, junto a las Madres, se explicó la importancia de la diversidad de las semillas, de la necesidad de tomar conciencia del peligro que corren las producciones hortícolas que están siendo avasalladas por la soja.
“La diversidad de la semilla hay que defenderla porque ya hay una ley para que las semillas sean certificadas. Una semilla es vida, la semilla se muere para dar vida a una planta. Yo quisiera saber si todos los que protestan en la mesa de su casa comen soja, seguro que no”, concluyó el campesino.

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