EL CAMINO DEL CHE

"POR EL RÍO PARANÁ VENÍA NAVEGANDO ERNESTO, HECHO CON BRONCE DEL NUESTRO, FLOR DE OBRA POPULAR".
Por Julián Lautaro.

El domingo 1° de junio fue recibido masivamente en Rosario el primer Monumento al Che Guevara en Argentina, tras una intensa y agitada travesía.
Atravesando Buenos Aires
El viaje viaje arrancó el martes 27 de mayo, desde Parque Sarmiento, con un nutrido grupo de militantes sociales acompañando el trayecto hacia su inmediato destino operativo, la zona de cargas del puerto de Buenos Aires. El monumento al líder revolucionario se abrió paso a traves de calles y avenidas porteñas, guiñó al Obelisco, siempre rodeado de banderas argentinas agitadas por brazos y por el viento. A lo largo del trayecto, tampoco faltaron cientos de personas fotografiando con sus celulares el avance de esta obra histórica. La destacable cobertura mediática destinada a esta actividad permitió apreciar los sesgos editoriales que los distintos medios privados le imprimien al tema.
Despedida en Dársena Norte
El miércoles 28, la fría mañana porteña no pudo aplacar el calor humano que se respiraba a orillas del Río de La Plata. Armados con gruesas camperas, gorros de lana, bufandas, ponchos, el público presente le ganó la batalla a la adversidad climática. Cuba, que no podía faltar a la cita, estuvo representada con su embajador, Aramís Fuentes Hernández; también asistieron Calica Ferrer, compañero de viaje del Fuser; Estela de Carlotto representando a Abuelas de Plaza de Mayo, y distintas organizaciones políticas como ATE, Juventud CTA, JG La Plata y Capital, MTL, Libres del Sur. El amplio espectro ideológico de las organizaciones presentes refleja la importancia de la figura del Che en el campo popular.
El mundo artístico no podía faltar y tuvo exponentes de renombre, Gabo Sequeira, Paula Ferre, Vicente Feliú, Arbolito y cuatro bailarines recientemente expulsados del Cuerpo de Baile del Teatro Municipal Gral. San Martín por la gestión macrista, interpretaron con sus cuerpos los sones de una sentida trova del cubano Silvio Rodriguez. La sintonía entre artistas y todos los presentes era completa, el momento más álgido de esa unión fue cuando el escultor se dirigió a la concurrencia.
Andrés Zerneri resaltó el caracter popular y colectivo del monumento, destacando que sin esa participación masiva jamás hubiese sido posible hacerlo realidad. En este punto viene haciendo mucho incapié, la gran prensa muestra al primer monumento al Che en Argentina como la obra de un artista plástico original y novedoso en su propuesta de hacerlo con llaves, y omite que la obra solo fue posible por el apoyo masivo que encontró en nuestro pueblo.
Asimismo, en su última alocución antes de embarcarse rumbo a Rosario, el escultor y activista social destacó que este gran logro de haber hecho el primer monumento al Che en Argentina no es la concreción y ni el final de una idea extravagante de un artista no comprometido, sino que marca el inicio de una movida cultural que se plantea nuevos desafíos en pos de movilizar y aportar a la unidad del campo popular.
Por las aguas del Paraná
Ante el saludo de todos los presentes, el barco zarpó lentamente con la estatua sobre la cubierta, amarrada con firmeza y rodeada de banderas. Además de la tripulación, a bordo también estaban el autor de la obra, el incansable camarógrafo del documental "900°C" y el socorrista y diseñador del sitio web oficial.
Durante el trayecto fluvial, hubo paradas en San Nicolas, Baradero y Villa Cosntitución. Allí se realizaron conferencias de prensa para medios locales, muy interesados en conocer los pormenores de este hecho inédito. También fue saludado por muchas embarcaciones de distinto porte con potentes sirenas a medida que avanzaba navegando contra la corriente. El saludo mas impactante fue el de un carguero de 220 metros de largo, que se detuvo a mitad del río, hizo sonar su sirena, bajo su bandera a media hasta y espero la respuesta que llegó con prontitud.
Que el viaje haya sido en barco nos hace recordar que Ernesto ya había recorrido el Paraná en el vientre de su madre, para nacer en Rosario. Años más tarde, fue otro barco surcando el mar Caribe con espíritu revolucionario el que lo llevó a Cuba, para convertirse en "el Che". Y ahora, su figura hecha en bronce por el aporte desinteresado de mas de 15.000 personas, también llegó en barco para encontrarse con el pueblo que lo vio nacer y lo esperaba con los brazos abiertos.
El emotivo desembarco
Al mediodía de un espléndido domingo, el pequeño barco se asomó por el horizonte. Frente al Monumento a la Bandera esperaban con los brazos abiertos rosarinos de todas las edades, familias, jovenes parejas de la mano, incluso hinchas de Central mayormente y también de Newel´s. La figura del Che logrando lo imposible, unir a "leprosos" y "canallas" en un mismo sentimiento.
Ante la mirada de centenares de camaras digitales, el capitán hizo gala de destreza acercandose al muelle para permitir que bajase Andrés Zerneri. El artista, visiblemente emocionado con la cálida bienvenida, se subió a la baranda de protección de la costanera y se dirigió a los presentes a viva voz, agradeciendo el apoyo recibido y destacando nuevamente la gran participación popular que acompañó a esta obra desde sus inicios. Apenas terminó su alocución fue acorralado por decenas de periodistas. Alli se gestaba su posterior afonía vespertina.
A orillas del Paraná y ante un sol radiante, le dieron la bienvenida a la obra escultórica bandas de rock, de percusión, un taller de teatro, murgas, y payasos, poniéndole toda su alegría a esta fiesta popular. Luego comenzó la travesía rosarina hasta la nueva plaza, en construcción, Ernesto Che Guevara, donde será emplazada definitivamente la escultura.
Por las calles de Rosario
En un pequeño remolque y sujetado a sus cuatro esquinas con fuertes sogas, la escultura fue transportada en una nueva caravana a traves de importantes calles rosarinas. La movilización, encabezada por la festiva persución de las murgas y el baile de bellas rosarinas vistiendo levitas multicolores, avanzó por las avenidas Pellegrini, Oroño y 27 de Febrero acompañada por las bocinas de motoqueros y autos que conformaban la marcha, causando sorpresa y alegría en la ciudad. No faltaron las banderas de Cuba y Venezuela, un claro apoyo a ambas revoluciones latinoamericanas. La única parada intermedia fue en el Parque de la Independencia donde comunidades originarias sumaron su apoyo. Desde alli, un camión de bomberos encabezó el reinicio de la marcha, con luces y sirenas encendidas.
En la futura Plaza Ernesto "Che" Guevara.
Ya era de noche y al llegar al cruce de 27 de Febrero y Laprida. En los terrenos aledaños a la vieja estación del ferrocarril, gran cantidad de personas eperaban ansiosos ese momento, y contagiaban una energía que ni la hora ni el frío podía aplacar. El magnetismo que genera la obra se apreciaba en las expresiones de quienes se paraban ante ella, admiración, respeto, cariño y hasta llantos sentidos acompañaban sus primeras horas en Rosario. Este clima incluso sensibilizó a los bomberos voluntarios, quienes en vez de regresar al cuartel, permanecieron en la plaza iluminando con sus potentes reflectores un nuevo escenario dedicado a la integración latinoamericana y caribeña. Desde allí, bandas rosarinas cerraron esta inolvidable jornada, a la vez que daban inicio a las 2 semanas de vigilia en la plaza, donde diferetnes movimientos y agrupaciones de base realizarán actividades permanentes esperando el 14 de junio.
Gran Caravana Buenos Aires - Rosario.
Integrantes de la Comisión Monumento al Che han confirmado que actualmente son más de 75 los micros reservados para viajar desde el Obelisco rumbo a Rosario. La masiva movilización partirá el mismo 14 de junio a la mañana. Ese día será la inauguración oficial de la histórica escultura popular y colectiva, la primera en el país dedicada al revolucionario. Esta actividad es el centro de las jornadas organizadas en la ciudad santafecina para celebrar el 80 aniversario del nacimiento del querido compañero y comandante, que arrancarán el 12 de junio y se extenderán hasta el domingo 15.