2 may 2008

VOLUNTADES SIN RUMBO

1º de mayo: estado de la clase trabajadora
Hoy en Argentina hay cientos de luchas de los trabajadores todos los días pero no hay una coordinación de la fuerza. Hay direcciones combativas de seccionales y de ramas en los sindicatos, hay direcciones de partidos de izquierda y hay mayoría de dirigencias burócratas. Pero los trabajadores como clase no tienen dirección. No hay unidad estratégica de los que luchan.
Ayer era ZANON, hoy es el CASINO o MAFFISA y mañana serán otras fábricas y empresas recuperadas. Los trabajadores resisten contra las cuerdas los embates de la clase dominante. El Poder Judicial juega a la justicia y entonces el juez X decide que los obreros que ocuparon la fábrica tienen derecho a defender su fuente de trabajo y a los pocos días el juez Y decide que no tienen razón y que deben ser desalojados. Así que el Poder Ejecutivo envía a la Policía y reprime. Los trabajadores terminan golpeados, expulsados y procesados pero la democracia liberal y su falsa división de poderes queda a salvo. El juez X y el juez Y forman parte del juego perverso de las instituciones de la clase dominante a la que se da en llamar democracia liberal.
Frente a esta situación hay, de parte de la organización de la clase obrera, numerosas voluntades y cientos de luchas, pero no hay un programa, una estrategia, una conducción. Porque no hay unidad, no hay coordinación, no hay dirección.
Grupos de delegados y militantes combativos y valiosos actúan como bomberos apagando fuegos todos los días. El fuego lo enciende la única clase que permanece unida cuando se trata de defender sus intereses y que deja sus luchas internas para dirimir por adentro, la clase que desde hace siglos nos ha hecho creer que el capitalismo es el sistema para que todos tengan oportunidades. Ellos y su mayordomo, el gobierno, tienen la iniciativa. Los trabajadores estamos contra las cuerdas, defendiéndonos de desalojos, expulsiones, persecuciones, bajos salarios, malas condiciones laborales, en fin, de los ataques de los patrones y el gobierno que cuentan con la burocracia sindical como su gran aliado.
Es hora de que los delegados de las seccionales combativas de los sindicatos más avanzados convoquen a los trabajadores a la construcción de una fuerza unitaria que plantee un programa, una estrategia y una dirección unificada para disputar la iniciativa a favor de la clase trabajadora.
Trabajadores de la Educación por un Sindicalismo Combativo
eltesco@yahoo.com.ar 1 de mayo de 2008

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