LA SITUACION DE LOS TRABAJADORES DE LA EMPRESA EDEA S.A.

La empresa EDEA. S.A., perteneciente al Grupo Camuzzi, tiene desde hace ya 10 años la concesión del servicio eléctrico, el cual explota de forma monopólica.
En los 10 años desde que la empresa privatizada presta el servicio, ha incorporado cerca de 100.000 usuarios en toda su área de influencia.
En el año 1997, la empresa contaba con 405.580 usuarios, y cinco centros de atención. Con una planta total de trabajadores en atención al publico de 30 trabajadores.
Según el reglamento de suministro y conexión la empresa tiene la obligación de mantener dentro del área geográfica de concesión, locales apropiados en número para la atención al público y con la ubicación adecuada.
Actualmente con 50.000 usuarios mas en el partido de Gral. Pueyrredón, cerró 4 centros de atención al cliente, manteniendo tan solo 1. Violando así impunemente el contrato de concesión. Ya que cuenta con una planta de personal de 30 trabajadores para atender los reclamos de 450.000 usuarios. Como consecuencia de ello los usuarios de la ciudad de Batan deben realizar 15 Km. para ser atendidos por cualquier cuestión que atañe al servicio.
A partir del año 1997 EDEA cerro las oficinas en Batan, en la zona del Puerto, en Santa Clara del Mar y las dos oficinas que tenia distribuidas en Mar del Plata.
Otro claro ejemplo de extracción de plusvalía y precariedad en el servicio, se manifiesta en la atención al cliente: en el año 2007, con 450.000 usuarios, la empresa cuenta con tan solo un centro de atención, asimismo, cuenta con 10 bajas de trabajadores pos stress laboral.
El centro de llamadas no cuenta con un número apropiado de trabajadores, pues la empresa apunta a que el mismo sea reducido e incompleto.
El sector de guardia reclamos, se encuentra reducido en un 50 %, mientras que en redes Aéreas, el plantel cuenta con aproximadamente un 70 % menos de trabajadores.
El Art. 53 inc. “O” de la Ley del marco regulatório del servicio eléctrico, estipula que todos los trabajos que le competen a EDEA, por la prestación del servicio eléctrico deben realizarse por personal bajo convenio colectivo de trabajo acorde a la actividad y con la debida capacitación que conllevan ejecutar esas tareas.
Sin embargo nada de eso se cumple: EDEA sigue teniendo el 50 % del servicio de Guardia Reclamos, el mantenimiento y construcción de líneas eléctricas, parte del sector de Normalización de perdidas (fraudes eléctrico), y el sector de conexiones e inspección tercerizados.
Sostiene la tercerización violatoria del marco regulatório. No cubre los retiros por jubilación, desconoce a los trabajadores como accionistas. Desconoce la exigencia del ministerio de trabajo de reincorporar a un trabajados despedido sin causa.
La excepción se transforma en la regla toda vez que la empresa con el objeto de incrementar su tasa de ganancia celebra contratos basuras con empresas contratistas, las que emplean trabajadores que no poseen capacitación alguna y desempeñan sus tareas sin las adecuadas medidas de seguridad inherentes a las mismas, ya que proveerlos de capacitación, materiales de seguridad y herramientas adecuadas importa un gasto que las empresas no están dispuestas a afrontar. Por ello terceriza arriesgando la vida de los trabajadores. No olvidemos que los mismos son aportados por el enorme ejercito de reserva, de modo tal que como los hay y en exceso, el capital en este caso materializado en las corporaciones, los desprecia o en su defecto los reemplaza.
Sabemos que estas acciones no solo se llevan a cabo con la finalidad de bajar el costo laboral y así incrementar la tasa de explotación, sino que también persiguen como finalidad inmediata, romper con la conciencia colectiva de la clase trabajadora, implementando así políticas que tienden a fomentar el individualismo y la falta de compromiso.
Si tenemos en cuenta que mediante la tercerización, consiguen que trabajadores de una misma actividad se encuadren bajo distintos convenios colectivos de trabajo, precarizando así no solo sus condiciones de trabajo sino provocando incluso que los mismos, lejos de actuar en conjunto, pierdan todo tipo de contacto entre si. Generando incluso por parte de la empresa situaciones por medio de las que podrían llegar a enfrentarlos.
Será quizás por ello que La empresa EDEA no cumple con la “obligación” que establece la ley que reglamenta la concesión del servicio eléctrico. En la que se ordena que el personal que se destine a la prestación del servicio eléctrico deberá estar encuadrado en el convenio colectivo por el cual se le otorga la concesión.
El OCEBA, organismo de contralor del Estado, “tiene la obligación” de acuerdo al contrato de concesión del servicio, de hacer cumplir a la privatizada todo lo concerniente a la prestación del servicio eléctrico.
Sin embargo la empresa EDEA. S.A. no invierte en generación, no invierte en líneas nuevas, no invierte en personal, produce apagones por falta de inversión, despide trabajadores sin causa desobedeciendo las resoluciones emanadas del ministerio de trabajo; deja sin luz a los barrios para garantizar el servicio en el micro centro; esta deliberadamente levantando el cableado y los postes de varios sitios de la periferia dejando sin servicio grandes zonas con la oculta intención de no incorporar usuarios que soliciten el beneficio de la tarifa social.
Por todo lo expuesto concluimos que el Estado una vez mas nos denota su verdadera razón de ser, un aparato de dominación, al servicio de una clase la económicamente dominante. Que no solo no produce, sino que se apropia de lo producido por todos los trabajadores del mundo. Sin olvidar jamás que la única clase que se halla en consonancia con el desarrollo de las fuerzas productivas es la clase trabajadora. Concientes de que las concesiones parciales, no son nuestro objetivo pretendido, ya que abrevamos por hacernos de los medios de producción con el objeto de que los mismos estén al servicio de la humanidad en su conjunto y no tan solo de una clase social como lo es en la actualidad. Es por ello que los trabajadores debemos crear la herramienta necesaria para cumplir con el rol que nos fue asignado por la historia y así abolir todo tipo de explotación del hombre por el hombre.